Elementos de la Policía Estatal de Puebla y personal de la Guardia Nacional recuperaron durante la mañana de este martes, las instalaciones de una empresa embotelladora ubicada en el municipio de Juan C. Bonilla, Puebla, tras más de 11 meses de ser tomada por el movimiento Pueblos Unidos.
De acuerdo con los reportes, la recuperación de las instalaciones de la planta industrial se realizó de manera pacífica, sin detenidos o enfrentamiento alguno, situación que fue bien recibida en la comunidad.
Pueblos Unidos, movimiento con historial conflictivo
Es importante señalar que en diferentes ocasiones los vecinos de Juan C. Bonilla habían pedido que se aplicará el Estado de Derecho para evitar conatos de violencia en la localidad.
Esto luego de que el pasado noviembre se registró una trifulca entre líderes de Pueblos Unidos y pobladores que exigían la reapertura del Registro Civil y la Junta Auxiliar municipal, inmuebles que fueron tomados a inicios de 2020 por personas del movimiento.
Mientras que a mediados de 2021, los habitantes dejaron en claro su inconformidad con el plantón de Pueblos Unidos, que abarcaba parte de la carretera federal México-Puebla a la altura del kilómetro 96, lo que provocó accidentes viales con víctimas fatales y desviaciones para quienes transitaban por la zona.
Los líderes de Pueblos Unidos están asociados a prácticas que implican el bloqueo de carreteras, edificios y amedrentamiento de opositores locales como forma de presión.
En octubre del 2019, uno de los líderes del movimiento, dirigió a un grupo de personas de la junta auxiliar de Santa María Zacatepec con el fin de acudir a la carretera que conduce al aeropuerto Hermanos Serdán, municipio de Juan C. Bonilla para oponerse a los trabajos de los colectores pluvial y sanitario.
Recuperación de embotelladora, sin heridos ni detenidos
Por todo lo anterior, los habitantes de la localidad exigían se aplicará el Estado de Derecho y las acciones de Pueblos Unidos respecto a la planta embotelladora se encauzaron en el marco de la ley.
El movimiento mantenía tomadas las instalaciones industriales desde hace 11 meses y se negaba a cualquier diálogo con autoridades de los tres órdenes de gobierno.
No fue hasta que un juez de control ordenó la recuperación de las instalaciones de la embotelladora y la restitución de las instalaciones a la empresa que le pertenece, esto luego de que se llevara a cabo una diligencia judicial con el acompañamiento de elementos de seguridad estatal.
La acción se realizó sin el uso de fuerza; se reportó que no hubo detenidos, heridos o enfrentamiento alguno.