Si los funcionarios encargados de vigilar el gasto de los recursos federales y la forma en cómo estos se ejercen en las distintas dependencias de Gobierno, son de los primeros en incurrir en prácticas inmorales e ilegales, qué podemos esperar de cómo se gastan en México el presupuesto los funcionarios de otras dependencias.
Cuando un empleado federal y su comitiva han de emprender un viaje fuera de su ciudad o del país, desde ese momento los recursos federales empiezan a desviarse. Hay áreas sobre todo las administrativas, que se detienen para priorizar “el viaje” en pro de la Patria; desde conseguir un vuelo que no desmañane a tan privilegiada comitiva y por ende, los boletos de avión se obtienen a un precio mayor.
También hay que considerar todas las gestiones urgentes y necesarias que deben hacerse para conseguir a como dé lugar, las firmas requeridas para que todos se vayan con sus respectivas provisiones económicas, esos los llamados viáticos.
Ya en “modo viaje de trabajo” los burócratas se transforman y se advierten como los privilegiados, o como si lo primero fuera el esparcimiento y después las labores.
En lo personal he escuchado experiencias aterradoras de cómo muchos empleados de Gobierno, viajan al extranjero sin el manejo mínimo requerido de un idioma como para tener un encuentro de trabajo productivo y fidedigno. Luego platican esas experiencias como como si impactaran sólo en su personal de su anecdotario.
Viajar con viáticos sobre todo al extranjero –con dinero de los mexicanos–, seduce a todos los burócratas de este país y hasta a sus familiares, porque ya en el extranjero la mayoría de ellos sienten que no son más mexicanos, es decir, se conciben superiores y hasta se comportan distinto, esto es, ahí sí siguen normas.
Si se es secretario de dependencia o director de área lo requerido es viajar en primera clase, hospedarse en hoteles mínimo de cuatro estrellas y comer en los mejores restaurantes.
Miles de mexicanos pueden perder su trabajo o se les puede pulverizar tanto su salario o sus prestaciones en aras de cumplir con los recortes al gasto público, pero de ahí a que los burócratas con sueldos estratosféricos dejen de viajar a todo lujo, hay una gran distancia, porque ellos “trabajan” a todo lujo. ¿O hay de otra forma? Preguntarían sin duda.
Acta Divina…El secretario de la Función Pública, Virgilio Andrade informó que la funcionaria Hilda García fue separada de su cargo; se le acusa de consumir champán, caviar y salmón ahumado.
Para advertir… Y después de todo el dispendio gubernamental continuará y hay quienes tienen hasta su guardadito que no ejercen pero garantiza sus pensiones millonarias.
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