· Cuestionaron los diputados albicelestes la información de Pemex
· Pero no llevaron las cosas al extremo anunciado; así son los panuchos
Me temo que Acción Nacional, aunque este martes no habló de demandas penales o administrativas contra el ex director de Pemex, sí le está poniendo el cascabel al gato, por lo menos puso en ridículo al nuevo director de la paraestatal disfrazada de empresa productiva.
La crisis de Pemex – dijo el presidente de los albicelestes, Marko Cortés Mendoza – no se debe a causas externas, como dicen los funcionarios de la empresa y los de Hacienda, sino que Pemex está yendo a la bancarrota por decisiones equivocadas del ex director Emilio Lozoya Austin, quién fue cesado por Peña Nieto en plena debacle de la empresa pero el presidente no le pidió que rindiera cuentas. 
Cortés Mendoza se quejó de que el director general de Pemex, José Antonio González Anaya, sólo hablara de las bondades de la empresa en plena crisis, y no supo darles datos duros a los miembros de la Comisión de Energía.
González Anaya sólo anunció que la empresa productiva del Estado ya contrató una línea de crédito con la Banca de Desarrollo para pagar hasta el 90% de los adeudos que tiene esta empresa con pequeños y medianos proveedores y que arrastra desde el año pasado.
Al comparecer ante la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, González Anaya dijo que gracias a esta línea de crédito, que no especificó con qué institución ni a cuánto asciende el préstamo, en los siguientes días se va a poder liquidar los adeudos que tienen. Pemex, reconoció, tiene adeudos por 147 mil millones de pesos, de los cuales ya pagó 20 mil millones en el primer bimestre del 2016.
Según el diputado panista, César Augusto Rendón, el pasivo que tiene Pemex con proveedores subió de 18 mil millones de pesos en 2012 a 147 mil para este 2016, por lo que le consultó cuándo se pagaría.
Comentó que el pago será para los proveedores con quienes Pemex tenga adeudos de entre 80 y 85 millones de pesos.
González Anaya aseguró, muy de pasada, de modo poco creíble, por el tono de su voz y su semblante que “Pemex enfrenta problemas de liquidez causados principalmente por la caída en el precio del petróleo, Sin embargo, agregó, Pemex es una empresa ampliamente solvente, tiene reservas petroleras suficientes y crecientes; es una de las empresas petroleras del mundo y es la empresa emblemática del sector energético de este país, y así se va a mantener”.
Aseguró González Anaya que, para poder cumplir con el ajuste de 100 mil millones de pesos, se prevén recortes en distintas zonas como 29 mil millones de pesos en un programa de austeridad (gastos no necesarios, viajes, viáticos y gastos que no sean esenciales) y se van a eliminar áreas del corporativo para ahorrar recursos.
Desglosó que tan sólo del recorte de 29 mil millones de pesos, 13 mil millones de pesos serán en el corporativo y se prevé que aquí sea la mayor parte del ajuste. “Se eliminaron-compactaron o disminuyó y se fusionaron sus funciones y se disminuyó el gasto en dos direcciones corporativas: la Dirección de Recursos Humanos, cuyas funciones esenciales van a ser absorbidas por la Dirección de Administración, y segundo la Dirección de Investigación y Desarrollo Tecnológico, que es la que se dedicaba a hacer investigación y desarrollo en el área petrolera; esta dirección va a ser absorbida por Pemex Exploración y Producción”.
Estas dos direcciones, explicó, son de relativa nueva creación y formaban parte antes de las direcciones mencionadas, la Dirección de Administración y Pemex Exploración y Producción. Pero los panistas no quedaron conformes. Ellos insisten en que los graves problemas fueron generados por errores humanos particularmente de Lozoya Austin.
Las respuestas dadas por Lozoya no dejaron satisfechos a los diputados panistas, que esperaban mayor claridad y mayor contundencia; que aclara qué es lo que está pasando: primero, en la economía del país. Y, en segundo lugar, qué es lo que está pasando con Pemex. El Grupo Parlamentario de Acción Nacional, pensaba que el problema de Pemex solamente era de liquidez, pero a pregunta expresa a su Director, no supo respondernos de qué tamaño es el problema de liquidez.
El Director de Pemex no supo responder a los diputados de Acción Nacional de cuánto se trata el problema de liquidez de la empresa. “Ahora, con la información que tenemos, sabemos que Pemex va camino a la quiebra si no se toman las decisiones correctas. La crisis es peor de lo que pensábamos.
Ante esta falta de información, los panistas solicitarán la comparecencia, por la gravedad del caso, del Secretario de Hacienda y del Secretario de Energía, pues es necesario que el Poder Legislativo dialogue de forma Republicana con el Poder Ejecutivo en estos temas que son de interés nacional.
También, el Grupo Parlamentario de Acción Nacional solicitará que vengan a San Lázaro los consejeros independientes del Consejo de Administración de Pemex, para que expliquen si ellos sabían lo que está pasando y estaba pasando con la empresa petrolera.
“Con la información que ya tenemos, podemos decir que durante los últimos tres años, Pemex ha sido saqueado y hasta el momento no hay responsables. Brasil nos está poniendo el ejemplo. Está llamando a cuentas a todos los funcionarios responsables para encontrar quiénes fueron responsables de Petrobras, inclusive, al ex presidente Lula. En Brasil, ya hay más de 50 personas detenidas por la crisis de la empresa del petróleo.
Aquí en México, hasta la fecha, nadie está investigando quién saqueó Pemex. Si se comparan los pasivos, en el 2012 llegaban a 18 mil millones de pesos. El problema de la mala administración comenzó en 2013 y esto es información de Pemex. El 2013 fue a 24 mil millones; en 2014, 56 mil millones; en 2015, 76 mil millones y la proyección para el 2016, de seguir las cosas igual, llegaría a 147 mil millones. Son datos de Pemex que preocupan y que acreditan la mala administración y el crecimiento desmedido de los pasivos a proveedores y a contratistas.
Algo que acredita el desfalco de la empresa y su mala administración: es cómo Emilio Lozoya engrosó el corporativo. En 2012 el corporativo de Pemex costaba 35 mil millones de pesos; solamente tres años después el corporativo está constándonos 67 mil millones de pesos.
A pregunta expresa del Grupo Parlamentario, de qué pensaba hacer el nuevo director para adelgazar el corporativo, sólo informaron los funcionarios de Pemex que se está pretendiendo un recorte de 13 mil millones de pesos, pero hay que decirle al señor director que, aún con ese recorte, sería de 54 mil millones de pesos el gasto del corporativo, muy por arriba de los 35 mil millones que gastaba cuando gobernaba este país Acción Nacional.
La crisis de Pemex no se debe, como ellos dicen, a causas externas. Principalmente, la crisis que está viviendo Pemex y su caminar hacia la bancarrota es por decisiones equivocadas internas. Los diputados, en este asunto, fueron propositivos olvidándose por unos momentos de que el lunes dijeron que actuarían como fiscales y demandarían al ex director de la empresa, En vez de ello, propusieron seis puntos para enderezar ese barco petrolero: Primero. Que se revise el régimen fiscal de Pemex, si se quiere que sea una empresa productiva y competitiva con el resto de empresas del mundo.
Segundo. Adelgazar el corporativo. Se queda corta la propuesta del actual Director de Pemex porque no alcanza ni siquiera el gasto que se tenía en el 2012.
Tercero. Quitar los privilegios a los líderes del sindicato y a la élite burocrática.
Cuarto. Abrir a la inversión en todos los sectores para poder aprovechar la reforma energética.
Quinto. Castigo a los responsables de la quiebra de Pemex y en su caso, la restitución del daño a la empresa.
Sexto. La monetización de activos para lograr un apalancamiento financiero y poder resolver el problema de liquidez y evitar la inminente quiebra. Ahora, el Gobierno Federal debe respuestas y debe hacer muchas aclaraciones. Por ello debe ir a la Cámara el mismísimo Secretario de Hacienda y el Secretario de Energía, para que digan cuánto costaron a los mexicanos las tardías decisiones del Gobierno Federal y poner orden en la empresa.
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