Claudia Rodríguez
En abril del 2015, se consignó en este espacio sobre la “versatilidad” del mexiquense Alfredo Castillo Cervantes respecto a su inclusión en el Gobierno federal para distintas funciones; desde la justicia, la protección al consumidor, la seguridad e incluso la promoción del deporte nacional.
El presidente Enrique Peña Nieto, designó a Castillo al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), luego de que no logrará su objetivo político y de seguridad para lo que fue nombrado como comisionado para Michoacán y justo a pocos meses de que se hubiera de conformar el grupo de deportistas que nos representarían en los Juegos Olímpicos de Brasil, 2016.
Alfredo Castillo justificó su nombramiento al frente de la Conade, al señalar que desde pequeño es deportista, que le gusta la actividad física y algunos deportes en particular; sobre todo el fútbol y diversas formas del tenis. Con lo que en primera instancia dejaba de lado el enfoque primario como director del máximo órgano deportivo del país y advertía que no cumplía para ejercer el puesto de acuerdo a la experiencia que exige el catálogo de funciones de la Secretaría de la Función Pública (SFP).
De cualquier forma todo parecía indicar que incluir a Castillo al frente del deporte de México, no era más que un asunto de “prioridad” para no dejarla sin trabajo y tal vez habilitado dentro de la nómina del Gobierno federal.
Pero sin ningún recato Alfredo Castillo llegó a la Conade, no precisamente a promover la activación deportiva nacional y mucho menos a apoyar a los deportistas mexicanos que se la jugarían en Río, no. Todo indica que arribó a instalar a parientes y más amigos en la Comisión deportiva del país y quizá a tomarse unas “merecidas” y largas vacaciones por todo el estrés que quizás había tenido desde que tuvo que salir a declarar que en el caso mexiquense de Paulette Gebara, la niña que se dijo no fue ni secuestrada, ni asesinada, simplemente se ahogó entre sus propias cobijas y el colchón de su cama.
Con todo y que la opinión pública poco creyó la hipótesis de Castillo respecto a Paulette, no será esa su mayor prueba de fuego; sino el cómo explicar tanta corrupción e ilegalidad al frente de la Conade.
Estar enamorado no puede ser una justificación para tanta indolencia y corrupción.
Acta Divina… “Conade es una agencia de viajes que propiamente lo único que hace es dar el dinero a las Federaciones. Mi tema no son las medallas. Para mí lo más importante es llevar a 15 atletas entre los primeros 10 del mundo”: Alfredo Castillo director de la Conade.
Para advertir… Si Peña Nieto nombró a Castillo; también él debería de responder por el mal desempeño de su amigo.
actapublica@gmail.com