En esta modernidad sumida en mercantilismo, consumismo e inmediatez la idea de lo que es un profesional se conceptualiza como un individuo de fantasía, un superheroe o un ser super-dimensionado por la estulticia popular.
Lejanos quedaron aquellos ayeres en donde el concepto profesional no existía con esa estúpida connotación, la dedicación, capacidad y talento eran conceptos que definían a un artista en su labor, por que el concepto de artista clamaba el amor, la pasión, la voluntad, la innovación, el placer, la calma, la reflexión y la motivación intrínseca, se les conocía como artistas, eminencias, eruditos, talentosos, coloquialmente como “bien hechos” o vulgarmente como “chingones”, se decía de un carpintero era un ebanista o era muy bien hecho o era un ¡chingón!, no se esperaba un trabajo bueno, barato y bonito, se esperaba y punto por que se sabía que el resultado debía ser más que satisfactorio.
No se conoció a Nicola Tesla como inventor profesional, ni a Louis Pasteur como un químico profesional, tampoco a Michelangelo Buonarroti como un escultor profesional, de Bertrand Russell jamás se dijo “es un agnóstico profesional” u “observad el andar meditabundo y distraído de Sir Isaac Newton, un matemático profesional” o “el Marques de Sade era un inmoral profesional”… la palabra profesional hoy parece extraviar cualquier virtud o falta de ella a cambio de un certificado de marca o clase y se espera que todo individuo llegue a ser profesional.
¿Qué es ser profesional actualmente? la definición etimológica dicta una palabra de orígenes latinos compuesta por pro- (hacia adelante), fateri- (admitir o confesar), -sio (sufijo que indica acción y efecto) más el sufijo -al (relativo a) es decir; relativo a la acción y efecto de ejercer una ocupación.
La definición más popular, pues la sustraje de “la enciclopedia de internet ” y nadie podrá señalar que sea impopular, define profesional como; “un miembro de alguna profesión (oficio, empleo u ocupación) o persona cuyo sustento de vida es a través del ejercicio de una actividad laboral específica.
Además tal definición describe; “los estándares educativo y de preparación que permiten a los miembros de una profesión ejecutar los específicos roles que caracteriza a la misma. Los profesionales, en su mayoría, están sujetos a estrictos códigos de conducta, rigurosa ética profesional y obligación moral con la sociedad.”
Toda una alegoría garigoleada por conceptos grandilocuentes.
No negará el lector que tales parecen requisitos para obtener un trabajo en cualquier empresa de postín… “tacón de chapin de seda y fustes almidonados”.
La mayoría no caen en la cuenta de que este concepto moderno y popular de “profesional” es realmente un concepto desmotivacional, condicionante y generador de inseguridad.
Pero cuestionemos algunos puntos finales de tal definición popular;
-Estándares educativos y de preparación : ¿serán los de la universidad Panamericana o los del ITAM? seguramente no serán los de las escuelas normales rurales o las escuelas zapatistas.
-Roles específicos : ¿se refiere acaso a roles de empleado, asalariado, freelance, outsourcing, comisionista o de confianza? o ¿roles en una cadena de mando o jerarquía como x de primera, x de segunda, eventuales, aspirantes, en capacitación, nobel, junior o senior?¿o tal vez se refiere a no ejercer como director de la CONADE cuando acabas de salir por piernas como titular de la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral en el Estado de Michoacán?
-Estrictos códigos de conducta : ¿se refiere acaso a proclividad a la sumisión supina o a un adoctrinamiento a prueba de balas o tal vez a un profundo complejo de esclavo o “workaholic”?¿o ser un connotado egresado de Harvard y alcohólico genocida con delirios de Napoleón?
-Rigurosa ética profesional y obligación moral : El bien y el mal, la ética y la moral, las normas y la libertad, el dilema moral y la ética de las virtudes ¿por donde empezar? ¿por la Iglesia y su moral? ¿por el gobierno y su ética? ¿o por el empresariado y su escala de valores?
¿Lo observa el lector? es un galimatías conceptual subliminal.
Donde quedó el ¡conozco lo que hago, adoro lo que hago, soy talentoso en lo que hago, cada día aprendo más de lo que hago por que me motiva, mi labor es fuente de orgullo y bienestar propio y ajeno!..
No, para nada, cada día se publicitan personas, empresas, compañías todas ellas “dedicadas” a la capacitación que prometen la “profesionalización” en todo ámbito laboral.
Hay quienes prometen convertir a cualquiera en un “lector profesional” (sic) enseñando a leer más palabras por minuto (ppm) para terminar lecturas rápidamente, ¿a quién carajo interesa leer más rápido? la lectura es un placer, una herramienta para el conocimiento, no una pinche carrera a campo traviesa o una una caladora eléctrica.
O quienes ofrecen servicios de coaching profesional, ahora ya no son cursos de superación personal ni cursos motivacionales.
O los cursos de inglés profesional donde te capacitan para que seas un profesional de la lengua inglesa ya sea inglés británico o ingles americano y hables como un nativo… nunca dicen nativo de donde ¿cockney o manchester?¿de Nueva Orleans o Nueva Inglaterra?¿Glasgow o Liverpool?¿Escocia o Australia?
Profesionalización policiaca, servicios profesionales, administración profesional, educación profesional, consultores profesionales, constructoras profesionales, contadores profesionales, entrenadores profesionales, profesionales en esto y lo otro y todo ello condicionado por una previa capacitación ¡y con mayor costo of course! que solo evidencían los magros resultados en generación de empleos y salarios dignos, el rezago de más de 100 años en educación, el oscurantismo en el sistema de orientación vocacional mexicano y la explotación laboral empresarial e institucional.
El sistema neoliberal haciendo uso de un entramado de desvalorización laboral e inseguridad social previa para después introducir un sistema de reconocimiento vía privatización-ganancia-certificación y el sentido etéreo por llegar a “ser alguien en la vida”.
Tal pareciera que no solo la educación esta al acecho del “empresariado”, también cualquier actividad humana.
Solo espero leer un anuncio donde se ofrezca un “diplomado” en fisiología de la evacuación para llegar a ser un cagón profesional…¿o ya existe?
-Victor Roccas