CIUDAD DE MÉXICO, 12 de octubre (AlMomentoMX).- Juan Benjamín Serment negó haber mandado a matar a sus padres, el cineasta León Serment y de Adriana Rosique, pero dijo que sí conocía a los homicidas.
En entrevista con Joaquín López-Dóriga desde el Reclusorio Oriente, el acusado aseguró que durante el ataque a su padre fue encañonado en el suelo y pensó en mantener su vida, además de que en la posición en la que estaba no pudo ver lo que ocurría con el cineasta.
Afirmó que una vez que se fueron los agresores vio que León Serment estaba herido, por lo que pensó en pedir ayuda y confiaba en que llegara la ambulancia para que recibiera los primeros auxilios.
“El impacto de ver a mi padre fue tan grande, que mi primera intención fue ir corriendo a pedir ayuda, pero sabía que mi padre necesitaba que estuviera ahí, saber que estaba con vida. Me dijo que estaba muy mal, que pidiera ayuda. Eso hice, pedía ayuda, me quedé a su lado”, expresó.
El joven confirmó que tenía problemas con sus padres, pero no una mala relación y que siempre buscó darles solución a través del diálogo, el mutuo acuerdo, utilizando terapias.
Respecto a los homicidas de sus padres, Juan Benjamín aseguró que los conoció en una fiesta, pero no los siguió tratando, por lo que “yo no puedo responder por lo que hicieron las demás personas”.
Sobre el asesinato de su madre, señaló que el día del crimen fue a verla y que tiempo después salió para llevar a su novia a un hospital, por lo que cerró la puerta, pero no le puso la doble chapa.
“Yo no tenía conocimiento de lo que iba a suceder y no cerré la casa totalmente segura porque no sabía que iba a pasar, si tenía que regresar. Me refiero a poner doble chapa, no cerré con chapa de seguridad”, dijo.
Un juez lo vinculó a proceso, junto a su novia y a otras dos personas (los autores materiales) por el delito de homicidio en pandilla.
AM.MX/dsc
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