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Querido Anthony… Esta carta te la escribe Don Hipócrita Señor Nais. Soy socio y presidente del Club Rotario de Mérida. Y yo, al igual que mi esposa Doña Fufurufa, ¡amamos el protagonismo! Nos encanta salir en el periódico, sí, sobre todo en la sección de sociales, donde solamente aparecen la creme de la mer, o sea, la crema de la merdé, o sea, dicho o traducido al español: CREMA DE MIERDA.
El motivo o razón de esta carta es solamente para decirte que lo sentimos MUCHO, pero no vamos a poder AYUDARTE, ¡porque no se nos da la gana! Ah, y también quiero decirte y que sepas que has sido muy ingenuo al creer al pie de la letra toda esa mierda de nuestro LEMA Y EMBLEMA: DAR DE SÍ, ANTES QUE PENSAR EN SÍ. Por si no lo sabes, esta frase fue producida por la mente de un niño mongol, ay, perdón, quiero decir UN NIÑO CON SÍNDROME DE DOWN. Ya sabes, solo corrijo mis palabras, no vaya a ser que al rato o mañana alguien, alguna alma muy sensible, vaya a demandarme por “discriminar a un grupo vulnerable”. ¡Estúpidos niños mongoles!
Ah, te decía. NO VAMOS A PODER AYUDARTE, PORQUE NO QUEREMOS, SÍ, PERO SOBRE TODO, PORQUE ESTÁS COMPLETO. Ay, si tan solo estuvieses en una silla de ruedas, ¡y si tan solo NO TUVIESES UNA O DOS DE TUS CHINGADAS PIERNAS, entonces así sí, CON MUCHO GUSTO CORRERÍAMOS A BUSCARTE, porque amamos el protagonismo, mi esposa Doña Fufurufa y yo! Ay, ¡ni te imaginas las fotos que nos tomaríamos los 3, yo, tú y ella! Porque tal vez y no lo sepas, ¡pero un chingado “pobre” y naco es nuestro ANGULO FAVORITO! Con él o con ella logramos POSAR como dos seres humanos caritativos auténticos. ¡Sí que nos encanta fotografiarnos con uno de ellos!
¿Ves? ¡Ves porque no podemos AYUDARTE! ¡Porque tú si tienes tus dos chingadas piernas, y porque contigo no podemos lograr captar, con la ayuda de la cámara fotografica, y ahora hasta con el I-phone 21,000, la imágen perfecta! La imagen de una señora fufurufa, o la imagen de Un Don Señor Hipócrita, fingiendo estar interesado en un pobre sentado sobre una silla de dos ruedas, o de cuatro, yo qué sé, ¡cómo podría saberlo, si nunca he estado sentado en una de ellas!
¿Ves, Anthony? Otra vez te lo digo y te lo repito: NO VAMOS A PODER AYUDARTE. Así que es mejor que te sientes, no tiene que ser precisamente en una silla de ruedas, porque parado te vas a cansar de esperar por nuestra ayuda.
Espero que esta carta, escrita para tí, por un señor tan NAIS como yo, que solo ama largarse de shoping a los ESTATES, te sirva de alivio a tus problemas. Y cuando te sienas poca cosa, o insignificante, tan solo recuerda que un señor tan NAIS como yo, que solo viste harapos gucci, fuchi y demás porquerías, se tomó el tiempo Y LA MOLESTIA; ¡míra qué hora es!, de escribirte esta carta, demostrándote así, de esta manera, que… ME IMPORTA UN CARAJO TU PROBLEMA.
Con Mucho Afecto Para Tí, Don Hipócrita Señor Nais
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