CIUDAD DE MÉXICO, 30 de noviembre (Almomento MX).- Se avecinan las vacaciones de fin de año, ha llegado ese momento para hacer las maletas, salir de viaje y reunirnos como ocasión especial con nuestros seres queridos. Sin embargo, es en esta temporada cuando incrementan los síntomas del llamado “Síndrome del viajero”, ¿de qué se trata?
Clínicamente, este síndrome es conocido como Trombosis Venosa Profunda (TVP) y es una condición relacionada con la formación de coágulos que afectan la circulación de la sangre en las piernas. Este padecimiento fue identificado a principios de los años 90 en personas que realizaban viajes demasiado prolongados, principalmente vuelos largos; no obstante, este síndrome puede afectar a cualquier persona que pasa demasiado tiempo en una misma posición, ya sea en la cama, sentados o en recorridos largos.
Quien padece el TVP puede experimentar dolor en una o ambas extremidades bajas, también puede observar inflamación; en casos severos puede haber dificultad para respirar, sensación de ahogamiento
y todo. En este sentido, eso es señal de que los trombos se han desprendido y pueden estar viajando hacia el pulmón u otros órganos.
El síndrome del viajero afecta principalmente a personas mayores, pero también hay factores que pueden predisponer a las personas a sufrir de este padecimiento, algunos de ellos pueden ser las enfermedades de coagulación, el sobrepeso, las várices, quienes sufren de niveles altos en colesterol y triglicéridos, quienes tienen antecedentes familiares de trombosis o de accidentes vasculares, quienes hayan tenido traumatismos recientes o intervenciones quirúrgicas, los enfermos de cáncer e incluso las mujeres que toman anticonceptivos orales.
El embarazo también puede ser considerado un factor de riesgo, por lo que es importante que la mujer consulte a su médico sobre los riesgos de viajes muy prolongados en las distintas etapas de este proceso.
Cabe destacar que cualquier persona podría sufrir este síndrome, pero en el caso de las personas con factores de riesgo, se deben tomar precauciones para tener un buen viaje. Por esta razón, en Almomento te compartimos algunos consejos que podrían ser de ayuda para prevenir el Síndrome del viajero:
Tobillos: separa un pie del suelo y, en el aire, dibuja círculos hacia un lado y hacia el otro. Alterna entre estirar la punta del pie y flexionar el tobillo hacia arriba. Repite el movimiento 10 veces con cada pie.
Hombros: con los codos pegados al cuerpo, eleva los hombros (como si quisieras tocar con ellos tus orejas), mantenlos arriba cinco segundos y vuelve a bajarlos hasta una posición cómoda. Repítelo 10 veces para relajar la zona alta de la espalda.
Cuello: esta es una de las zonas del cuerpo que más sufre en los viajes largos. Sin los accesorios adecuados, podemos dormir en posturas incómodas que ocasionan tirones o contracturas. Te recomendamos mover el cuello de vez en cuando. Dibuja círculos lentamente hacia un lado y hacia el otro.
Respiración: este ejercicio sirve para estar relajado. Inspira todo el aire que puedas por la nariz y mantenlo durante unos segundos en tus pulmones. Expúlsalo lentamente por la boca. Realiza cinco inspiraciones profundas. Detente si sientes mareo.
Pelotas: si te es posible, lleva una pelota mediana. Es muy útil en viajes largos. Con ella podemos ejercitar las piernas colocándola entre las rodillas, apretando hacia el centro y relajándolas unas 10 veces. También sirve para ejercitar los brazos si la tomamos entre las palmas de las manos, frente al pecho, con los codos paralelos al suelo y la apretamos. Las pelotas pequeñas son ideales para trabajar antebrazos y muñecas: tómala en la palma de tu mano y apriétala.
Abdominales: Si es posible, mientras estás sentado, lo único que tienes que hacer es levantar ligeramente ambos pies del suelo a la vez, intentado acercar tus rodillas hacia tu pecho. Mantén la posición durante 10 segundos y vuelve lentamente a apoyar tus pies en el suelo. La fuerza debe provenir del abdomen, la espalda debe mantenerse erguida (apoyada completamente en el respaldo del asiento) y tus brazos y hombros relajados.
Medias de compresión. Una excelente y sencilla medida preventiva durante tus traslados en estas vacaciones, es el uso de medias y calcetines de compresión graduada (y tallas personalizadas), como los de una marca de origen Suizo, llamadas Sigvaris que, aún si estás sentado (a), estimulan la circulación sanguínea y ayudan a prevenir hinchazón en las piernas, así como un posible evento de trombosis venosa; además, su uso constante ayuda a evitar o eliminar síntomas de pesadez, dolor y cansancio e hinchazón en piernas y tobillos durante un viaje.
AMN.MX/kica