ROMA, ITALIA, 5 de diciembre (AlmomentoMX).- Un 60 por ciento de los votantes optó por no aprobar los cambios a la Carta Magna. En tanto, desde el mundo político rechazaban el proyecto porque “entregaba mucho poder al jefe de gobierno”.
Italia estaba dividida: hasta antes de este domingo nadie sabía a ciencia cierta quién ganaría en la votación del referéndum constitucional que buscaba modificar 47 de los 139 artículos de la Carta Magna que rige al país desde después de la Segunda Guerra Mundial.
En ese clima de tensión, luego que la oposición en bloque llamara a votar en contra del proyecto de Matteo Renzi, pese a haberla apoyado en la Cámara de Diputados, los italianos se separaban en dos: el norte, más rico, votaría que sí; mientras que el sur se inclinaba por el no.
A las 11 de la noche cerraron las urnas. A esa hora comenzó el conteo de votos que desde temprano vislumbró la derrota del Primer Ministro. La renuncia era la consecuencia ya anunciada. Renzi había amarrado su continuidad al triunfo del Sí en las urnas.
“El no ganó en forma clara y neta” declaró con la voz entrecortada en una conferencia de prensa en la que dijo: “Asumo la responsabilidad de la derrota. Mi experiencia como jefe de gobierno hasta acá llega”.
Así, el líder del Partido Democrático anunció que este lunes presentará su renuncia ante el presidente de la República, Sergio Mattarella, quien aún podría no aceptarla.
Renzi, visiblemente afectado agregó: “He perdido. Pero en la política italiana no pierde nunca nadie. No ganan, pero ninguno pierde. Yo he perdido y lo digo en voz alta”.
Según los conteos de la televisión pública Rai y el canal privado La 7, aproximadamente votó un 70 por ciento del padrón electoral, de ellos, un 60 por ciento dijo no al cambio constitucional.
Luego de los resultados, se abren una serie de escenarios en Italia: la definición de estos marcará cómo se garantiza la estabilidad política.
Entre las opciones que se barajan está la de adelantar las elecciones. Así lo señaló el líder de la xenófoba Liga Norte, Matteo Salvini, así como representantes de la centro derecha de Forza Italia. Su líder, Renato Brunetta, festejó el resultado asegurando que “han sido derrotados los grupos de poder”.
Otro de los que se manifestó luego de la derrota de Renzi fue Beppe Grillo. El líder de Movimiento 5 Estrellas celebró la decisión de los votantes: “Adiós Renzi, los italianos deben votar lo más pronto posible”.
Los cambios propuestos
La reforma buscaba, en lo esencial, modificar el bicameralismo perfecfo. En Italia, ambas Cámaras tienen exactamente las mismas facultades. El demócrata proponía avanzar a una única instancia legislativa.
Además, se proponía la reducción del Senado: de 350 representantes a 100, los que ya no serían elegidos por voto popular, sino que asumirían los consejeros regionales, alcaldes y 5 nombrados por el presidente de la República. Estos tampoco cobrarían sueldo, sino que su salario correspondería a lo ganado en sus cargos.
También se buscaba frenar el poder de las regiones, para eso el Estado quedaría con la potestad de siempre tener la última decisión.
La mayoría de la clase política, desde la extrema izquierda hasta la extrema derecha, e incluso miembros del Partido Democrático, se opusieron porque, según ellos, otorgaba demasiado poder al jefe de gobierno.
AM.MX/fm
Powered by WPeMatico