Es por todos ponderada la educación de los ciudadanos, se sabe desde siempre que es la base del desarrollo de una sociedad y por ende observa como último fin el bienestar de todos los individuos que la componen.
Lastimosamente todo lo anterior siempre queda en un maravilloso precepto, una idea muy hermosa pero utópica, la realidad es que mediante la educación se ha logrado manipular, adoctrinar a millones de seres humanos para alcanzar la mediocridad social, para nadie es ya un secreto que la educación en México, como base de desarrollo humanista, es un rotundo fracaso y que las reformas educativas sólo servirán para ahondar más ese descalabro, una entrañable amiga comentaba que los mexicanos estamos en el borde del precipicio y a punto de caer, lamento declarar que ya hemos caído en ese precipicio y cada día nos precipitamos más hacia un fondo que espantosamente no aparece, ¿qué tan mal podemos aún estar los mexicanos, el país, el estado… la sociedad?.. la respuesta es; todavía mucho, muchísimo peor.
En las últimas décadas los señalamientos por la corrupción han aumentado de manera exponencial, realmente experimentamos un estado gobernado por psicópatas a quienes únicamente atinamos a señalar con sorna, burla, buscando alivio a la debacle en la que nos someten genuflexos a sus caprichos, declaramos airadamente que el presidente en turno es un ¡pendejo! de antología y que otros administradores de la riqueza nacional son tan ineptos e ineficientes como ellos mismos nos han querido hacer creer mediante “la opinión pública”.
Y aquí están millones de mexicanos pidiendo una cabeza de turco, o al “pendejo nacional”, o al “putito de los pinos”, como tantos con supuesto ¡valor cívico! gustan de llamar a quien nos ha procurado una proverbial “cojida” (sírvase el lector considerar, si así prefiere, tal palabra como perteneciente al argot de la tauromaquía).
Pero regresando a la médula de mi exposición, asombrosamente tenemos aún reservas inimaginables de recursos naturales, y lo más importante tenemos reservas ilimitadas de esperanza, de fe… es decir, de pendejos, la gran mayoría certificados y etiquetados incluso por la santa madre iglesia.
¿Cómo es posible que tras décadas de resultados deplorables, estériles e irrefutablemente fraudulentos, los mexicanos continúen dispensando sus vidas y las de sus hijos a un sistema electoral totalmente viciado en manos de criminales genocidas?.. ¿verdad que suena escalofriante?, y no es para menos, la responsabilidad de más del 90% de los políticos y administradores de la abundancia en un vergel como México convertida en una zona de guerra, un masivo cementerio clandestino, el patio de juegos de los cuatro jinetes del Apocalipsis, el infierno de Dante sobre la tierra, la escupidera de los Estados Unidos de Norteamérica, etc… no es para soslayar.
¿Habrá algún día justicia para los miles de millones de mexicanos víctimas de esa casta maldita que a través de sus generaciones malparidas han disuelto la promesa de una sociedad humanista en un mero amasijo de idiotas, ganado, esclavos al servicio de sus más febriles deseos? ¿Ferraris bañados en oro?, ¿casas blancas de millones de dólares?, ¿viajes para sus malditas familias y lamesuelas a todo lujo alrededor del mundo?, ¿lupanares legales regenteados para uso exclusivo de privilegiados del sistema?, ¿vidas que un jeque árabe envidiaría?, ¿empresas de comprobado valor comercial obsequiadas al compadrazgo por precios simbólicos?.. y tantas otras cosas más. ¡Y todo pagado por un pueblo ya no dormido, sino de pendejos que aún creen en la redención, el perdón, la buena voluntad celestial y el liderazgo de un dedo como clave del desarrollo social.
¡Carajo! es para embotar a cualquiera con un ápice de consciencia, pero no así a millones de mexicanos obnubilados en las eternas promesas de politiquillos y demagogos que anuncian tiempos mejores… claro que la temporada alta será para ellos y sus camarillas, sanguijuelas del presupuesto nacional.
Ah pero todavía cabalgan conocidos intelectuales como John Ackerman que defienden el sistema electoral escudando, por ejemplo, a morena en la supuesta donación de más de la mitad del presupuesto como partido a causas ¡tan nobles! como las universidades gratuitas, ¡¡si, felicidades Sr. Ackerman!! encontró usted la excepción a la regla, porque todo el restante presupuesto a los demás partidos en las próximas elecciones servirá para lo mismo que ha servido durante decenas de décadas, para mantener a este país, o lo que aún queda, en la mediocridad, el atraso, el servilismo, el oscurantismo político y la esperanza… esa esperanza que tiene anquilosada la capacidad de raciocinio.
¿Para qué queremos universidades gratuitas si los individuos que acceden a ellas ya son lisiados intelectuales, parapléjicos de consciencia, enfermos terminales de dogmatismo, drogadictos de la fe y la esperanza, intoxicados aculturados?..
¡Y señalen a este su servidor como el amargado eterno!, no importa, ya que la realidad rebasa por mucho cualquier panorama o escenario trágico o deplorable que pudiera yo plantear, la ventaja de mi amargura es la transparencia con la cuál observo mi entorno, sin filtros de fe, justificación o perdón, ya no hay manera de convencerme ante la promesa de ¡otro! liderazgo que “ahora si nos guiará rumbo al México prometido”, muchísimo menos si es en compañía y cooperación de los mismos hijos, nietos, sobrinos de puta que nos han jodido siempre.
La única esperanza que acepto es la esperanza de un niño que sueña y vive en sus sueños, todos los demás somos adultos que les debemos el cumplimiento de esos sueños no con más esperanza estúpida o vía un líder mesiánico, si no con una consciencia clara de lo factible e imposible, de lo conducente y lo omiso, de lo útil y lo inútil, de asentar los pies en la realidad o seguir levitando a lo pendejo entre nubes de promesas rosas con el crucifijo en las manos y mentando a dios y a la virgencita cada tres enunciados, de seguir haciendo, o no, las mismas cosas con los mismos actores y las mismas reglas esperando resultados diferentes…
Infaustamente la sociedad mexicana no quiere entender, ni entenderá pronto o tarde el juego tan cruel al que nos tienen sometidos, hoy a pesar del fraude en el estado de México las crapulentas mentes que sodomizan al 96% de los mexicanos cada día están perpetrando una vez más el programa de convencimiento para pendejos asociados al voto, a la esperanza, la maestra Delfina pasó con poca pena y muchísima gloria unas elecciones arregladas de antemano por lo cual ahora se enfilan nuevas municiones electorales para Claudia Sheinbaum, está si con altísimas posibilidades de ganar un trofeo para el dedito de “Mr. Forgivme”, reactivando de paso la alicaída intención del voto y difuminando el peligro que esto representa para los presupuestos e intereses financieros de ¡todos los partidos incluido morena! y el truculento “sistemita” electoral mexicano.
Así, termino apuntando; para que esta banda de psicópatas continúen medrando con un pueblo entero se necesita una educación muy especializada, cantera de mentalidades mediocres, cautivas, esclavizadas, frívolas y con fe, muchísima fe, porque hace falta un buen calzón para sostener tanta caca, tanta mierda.
-Victor Roccas.