Claudia Rodríguez
Si alguien es responsable de situar en riesgo y en zona vulnerable a México, es sin duda el presidente Enrique Peña Nieto, dadas las condiciones en que tiene al país y como ya en casi quince días, lo entregará como máximo jefe de la Federación.
Un desorden descomunal es el territorio nacional en varias vertientes, de las que por supuesto hay muchos quienes sacan ventaja y se aprovechan; desde la legalidad incluso.
Es cierto que nuestra moneda el peso ha sufrido en los últimos días vaivenes y fluctuaciones que lo han debilitado frente a otras monedas en el mundo, lo que nos pone en una situación de desventaja con los mercados internacionales; pero todo y hasta ahora, es responsabilidad de la presente Administración.
Mucho se dice que los dichos y los hechos del gobierno electo, han provocado es desliz de nuestra moneda sobre todo frente al dólar norteamericano; sin embargo una economía fuerte en lo fiscal y en lo financiero, resistirían los vaivenes de la política nacional.
A revisión y ha llamado a cuentas, debería estar el actuar de Peña Nieto y equipo de funcionarios públicos, que en seis años llevaron al peso de 12.86 pesos hasta los 21.00, al menos en dos ocasiones.
Durante todo el sexenio, la ruta para fortalecer el peso apaleado, ha sido que el banco de México (Banxico) eleve las tasas de interés, lo que hará en pocos días al parecer, para llevarla de un 7.75 a 8 por ciento.
Ciertamente no se ve a nadie preocupado porque esta situación eleve los costos en todo sentido, incluso de una obra con sobre costos y en donde media la corrupción, como es el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que de manera obcecada, sigue en construcción, aunque la misma dejará de cursar la misma noche del último día del mes corriente.
Mucho menos corre la preocupación entre quienes se sirvieron de los mexicanos y les ofrecieron a diestra y siniestra: cuentos de cuentas por cierto, igual de caras por sus costos elevados fuera de la realidad y lo justo.
Ya se van y tratarán de seguir tropezando desde las trincheras de poder privado que construyeron con dinero público, al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador que entrará en funciones el próximo primero de diciembre.
Ya nos conocemos el camino, muestra de esto es un Felipe Calderón que primero a través de operación fallida y fraudulenta, intentó regresar al poder vía su esposa Margarita Zavala, situación que ahora refrenda con la propuesta de crear un partido político, que a sus intereses convenga y desde donde claro, con recursos de la nación y del pueblo, intentará golpear a López Obrador.
Que rindan cuentas antes que se les dé más dinero público.
Acta Divina… El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que a tres semanas de que deje la Presidencia, se cumplió en materia económica y de estabilidad.
Para advertir… ¿De su bolsillo y el de su cercanos y amigos?
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