Por Gilberto Celis
En estos días de hierro, que en valla cerca y separa a los priistas en condición de apestados y adversos de su propio candidato presidencial, el Dr. Z…
— La prescripción es mantenerlos a distancia en el saludo…
— ¿cuál si fuera paseíllo en el zoológico de Chapultepec?…
—…que obligan a considerar el ataque al retén militar de la planta hidroeléctrica de Chicoasén como argumento suficiente para implantar un moderno estado de sitio, en aras de la seguridad nacional.
— De quién, si cada funcionario cuando habla parece La Patria misma; y comparsa los Estados Unidos Mexicanos.
Mas esa amenaza del gobernador sustituto del interino, diciendo que otra agresión y la prudencia dará paso a la respuesta merecida a quienes echaron mano a sus fierros como queriendo pelear…
—…Días nuestros, de urgencia, por imponer el hierro. Única manera ya posible de imponer la verdad del poder.
— Su verdad, lo ya decidido desde la lógica de mando.
FALTÓ ALGUIIEN QUE SUPIERA
Lejos de las palabras híbridas, en el imperio del fax, le digo que hay un rito en el sacrificio de don Luis Donaldo Colosio. Paralelismo equívoco, frívolo, o falsario, si gusta; pero son cosas que se piensan en tanta confusión provocada.
Sacrificio que recuerda, en el descaro cínico, aquella historia del Venerable Abraham Lincoln. La del ladrón que le pone la pistola en la sien a su víctima y le dice: “Si no te entregas en el acto, serás tu propio asesino”
Le digo, Sacrificio ceremonial. Ritual con acciones que provocan acontecimientos. Crisis mundana, material, que reta al poder divino.
— A ver, cómo es eso.
Adviento. Cuatro semanas que en el primer domingo da el advenimiento de Donaldo Colosio; la nueva alianza, la esperanza.
Donaldo, con la anunciación reconoce al Padre. Acepta y confiesa que es barro hechura del alfarero que con sus manos crea la Nueva Generación.
— “Para mí, Carlos Salinas es mi líder y Jefe, mi amigo, mi hermano mayor, un ejemplo”
— El regocijo olvida que aún sin ayuno, el Adviento es penitencia y austeridad. Que quienes rompieron la Alianza anterior, en escarmiento, fueron exterminados.
— ¿Joaquín “La Quina” Hernández, Carlos Jonguitud, el banquero Legorreta, el empresario Bolaños, y demás?
PALABRAS, LO MÁS IMPORTANTE
Epifanía. Con ella el PRI formaliza la profecía de la XIV Asamblea nacional y en festividad proclama la Buena Nueva que empieza a manifestarse en los Estados Unidos Mexicanos.
Hay quien señala que lo tenido por Colosio hasta diciembre del ’93, ya le fue negado a partir del ’94.
— El día que en la tarde fue sacrificado por falta de seguridad, dice Barrios Gómez le fue robado en la mañana el automóvil a la esposa.
Sin embargo, en sus pronunciamientos Donaldo muestra obediencia y con humildad padece en campaña. En tanto, se alienta al pueblo a tener fe en la Esperanza que será, previo voto, la luz para todos. Gracia merecida por su paciencia y perseverancia.
Mientras, con la paz que estalla en Chiapas, se hace vicio la más turbación a cada gruñido del lobo estapario guarecido en la Lacandonia, Jurasik Park.
Pero Donaldo Colosio, fiel al rito inicial, invoca y es escuchado. “No se hagan bolas nadie, el PRI ya tiene candidato”.
— Aun así, al clamor de Carlos Salinas, “Que hable México”, hoy Donaldo Colosio reclama: “Dad voz a la Nación”.
— Cómo hablar en esos años si la voz no escucha. Y con ello, las compulsiones de temperamento por la duda en la Nueva Alianza.
LA CRUZ SIGNA Y SANTIGUA
Cuaresma. El Calvario. Los presentes oyeron la voz que como un trueno fustigaba, reprochaba pedir unidad y armonía social cuando no se era eficiente en la atención a los reclamos y demandas del pueblo por mejores condiciones de vida.
— Clama y reclama “traducir las buenas finanzas nacionales en buenas finanzas familiares”.
— “Esa voz no ha venido por mí, sino por ustedes, Está llegando el juicio de este mundo, Cuando ya sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí” Dijo esto, indicando de qué manera habría de morir” (San Juan 12,20-33)
Donaldo Colosio en el pódium del Bienaventurado. Monumento a la Revolución. Ceremonial que presidía la Cruz, santificando. Atestiguan los obispos de cuello blanco, en comunión, común unión con el político, el empresario, la curia yuppie con alzacuello.
Missa, mysterium, oblatio. Despedida, misterio, oblación.
La Cruz renueva el Sacrificio. Signa y santigua. Unge al ungido, sacerdote y víctima.
La Cruz, centro de la historia.
Tenga temor de Dios. “No te creas sabio a tus ojos. Teme a Dios y huye del mal”. Advierte en el Oriente don Gilberto Celis Casanova.
SE APUNTAN LOS SUCESORES
Por eso digo: “Cruel es la cólera e impetuoso el furor, pero ¿quién es capaz de suprimir los celos” Sepa: “Son sinceras las heridas hechas por quien ama, pero engañosos los besos del que odia”
En la liberación del cautiverio, el paso del Ángel de la Muerte que mata al primogénito de los egipcios.
El alfarero no llega a tiempo para salvarlo de la gente sin piedad, del hombre injusto y malvado.
— El bautismo del primogénito de Israel, que se salvó gracias a la sangre de cordero derramada en los postes de su casa…cuando el Ángel de la Muerte pasó por ahí.
Y la nueva vida de gracia, renueva el Sacramento.
¡Aleluya!
SEMANA DEL SILENCIO
“Si me amas, no llores”, dicen que se escuchó por TVEnlace esa parte del mensaje grabado para su dignísima esposa por Donaldo Colosio en su vuelo a Tijuana.
Y esa mirada triste que ya le acompañaba. El rictus que daba a su rostro una expresión forzada.
Allá, en la región más viril del viril estado de Sonora, en Magdalena de Kino, esa flor que el Presidente Salinas toma. El toque en su frente y el trazo de la diestra y la guarda en su costado izquierdo. Oración. Pasión.
— ¿Esperaba alguien que se la colocara en el ojal?
— “¿Ahora que tengo miedo, le voy a decir a mi Padre: Padre, líbrame de esta hora? No, pues precisamente para esta hora he venido. Padre, dale gloria a tu nombre”. Se oyó entonces una voz que decía: “Lo he glorificado y volveré a glorificarlo” (San Juan 12, 20-33)
Qué cosas se piensan en tanta confusión provocada.
Y este México inventado por el TLC, en el momento que se destruye la visión impuesta, parece un generador de víctimas.
— Por eso le digo
*Publicado Mayo 2’1994
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