Redacción Noticias MX.- Cuando en agosto pasado se supo de la existencia de un Juez de Control joven, formado en el servicio civil de carrera del tribunal constitucional capitalino que tuvo el valor de enfrentar sin complejos, a la ex Jefa de Gobierno capitalino, juzgada por los probables delitos vinculados a su desempeño como servidora pública, la imagen del joven juzgador emergió de manera admirable.
Aun cuando a las 48 horas de emitido su primer resolutivo, conteniendo la multicitada medida cautelar de la prisión preventiva especial para Robles Berlanga, se difundió su vínculo consanguíneo con la diputada federal Dolores Padierna, esposa de René Bejarano, lo que pudo constituir un factor en contra de su competencia para saber del asunto.
No obstante lo anterior, resultó valiente y digna la actitud del juez Felipe Delgadillo Padierna.
Hoy dos noticias sobre su actuación, que ahora mueven a la duda sobre su imparcialidad: La forma en que vuelve a emitir calificativos ofensivos y que discriminan a la juzgada Rosario Robles (sea quien sea) al momento de ratificarle la medida cautelar de la prisión preventiva, lo que le impide a la sexagenaria defenderse mediante alguna otra medida cautelar, diferente a la que le endilgó en su resolución. El argumento nuevamente fue que “Rosario Robles podría evadir la acción de la justicia”.
Y sin embargo, este jueves calificó de ilegal la detención de 27 de los 32 detenidos en el operativo del pasado martes 22 en la zona de Tepito, en el centro de la Ciudad de México, donde aseguraron más de dos toneladas de mariguana y armas de fuego. Por lo que fueron dejados en libertad inmediata -sin mediar unas horas más con prisión preventiva para una investigación más completa-, tal y como aplica el criterio con Rosario Robles Berlanga.
Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, juez de control del Reclusorio Sur, señaló que la versión de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la capital de la República sobre las capturas es inverosímil, plagado de mentiras e irregularidades.
A los 27 detenidos, todos vecinos de la alcaldía de Cuauhtémoc, demarcación que fue gobernada por Dolores Padierna y donde tiene la tía del Juez de Control, “aposentados sus reales” de dominio político.
Ante estas hipótesis, manejadas por por los abogados defensores de Rosario Robles, quienes informaron en un comunicado de prensa que de manera oficial han pedido al juez Delgadillo Padierna que se separe de este caso porque su actuación ha sido “ilegal y con ánimo de animadversión en perjuicio de Robles Berlanga y sus abogados”.
“El juez Delgadillo Padierna, sobrino de la diputada Dolores Padierna, no ha sido digno de la alta investidura que porta, ni acorde con los parámetros constitucionales convencionales y legales que rigen la actuación judicial”, señalaron en ese escrito del despacho que defiende a la exfuncionaria federal, difundido este viernes por la tarde.
Se consolida este juez de Control, para la figura emblemática de la revancha política de la Cuarta Transformación. En él se materializa una de las actitudes más comunes en este lapso que lleva la nueva administración, que polariza a la opinión en dos bandos irreconciliables, pero sobre todo que siembra un espíritu de prejuicio y de desconfianza en un poder que como el Judicial, debe de contar on la cnfanza y certeza a que obliga la fe pública y sobre todo, la buena fe cívica.
Hch