Norma Meraz
La reforma al sistema judicial –de 500 cuartillas–que se frenó a último momento, es una iniciativa “sin autor”.
Nadie asume la maternidad de tal propuesta.
Dicha reforma tendrá que modificarse o de plano partir de cero pues se considera atentatoria a las libertades. Como ejemplo, el asunto del arraigo, que se considera en casos de excepción, ahora sería aplicable en general.
Extraña que en este gobierno de “izquierda” esta pretendida reforma es mas de derecha, de mano dura, con sello policial.
Vivimos en un país carente de Estado de Derecho y esto lo hace débil y vulnerable, hace falta hacer mucha investigación de las instituciones.
Esta reforma que se filtró a tiempo para detenerla aparece como si fuera un documento simple. Las 500 cuartillas contienen el retroceso en la procuración de justicia, intentando por ejemplo juzgar igual a un supuesto delincuente que se robó un chocolate o un pan que a un secuestrador, violador o asesino.
Ese texto destila 2mano dura”, implementando un “populismo penal”.
Si nos fijamos en la ausente atención a la crisis de salud, no sólo con la creación del INSABI una instancia para proporcionar atención a la salud universal, no es más que un grave error crearlo sin contar previamente con reglas claras de operación, sin la infraestructura que se requiere, se anuncia la construcción de 100 clínicas mensualmente y la convocatoria para contratar a 17 mil médicos y enferner@s.
Hoy, de nuevo los padres con hijos que padecen cáncer no están siendo atendidos y no cuentan con los medicamentos requeridos, se manifiestan ante la urgencia de contar con los medicamentos, pues el sistema de salud pública no los tiene.
Desapareciendo programas que existían, aún con grandes deficiencias como el Seguro Popular, que cubría un cuadro de 270 enfermedades, que con estos cambios din estrategias de corto plazo, no se atienden.
No se vale experimentar en el tema más sensible como es la salud, la vida de las personas.
Hoy, un grito en el cielo de los enfermos pobres que de pronto les cierran los sitios donde eran atendidos, carecen de información sin saber a dónde acudir. En el hospital de Zumpango, en el Estado de México, hay un aparato llamado Da Vinci, que es un robot, capaz de atender 50 casos de enfermos, está sin funcionar, bien empacado, porque simplemente no hay personal capacitado para operarlo.
Existe un grave problema de comunicación del gobierno, Los mensajes son a destiempo y muchas veces contradictorios.
Que ya dejen de lucrar con la culpabilidad del pasado; que lo público no se entienda como exclusividad de los políticos versus la sociedad civil y que se elimine el doble discurso.
Otro caso es la creación del Banco del Bienestar, y se construirán 2 mil 700 sucursales cuya función será entregar las pensiones a los adultos mayores, preferentemente; pregunto: ¿cómo le irán a hacer en Durango, un Estado con poco más de dos millones de habitantes ubicados en la capital , unos 600 mil, en Gómez Palacio y Lerdo con alrededor de un millón y con más de cinco mil comunidades con menos de 100 habitantes dispersos en su mayoría en la Sierra Madre Occidental que colinda con Sinaloa y Chihuahua?
Y el tema de la inseguridad, la violencia y la impunidad en una democracia como México, con el mayor número de muertos en el mundo producto del crimen organizado, tráfico de armas, de personas y secuestros, entre otros.
Estos son los temas de fondo que debe atender el gobierno, además del problema de la migración que México tiene que detener –por orden de Donald Trump– para que no lleguen a la frontera norte ya que quieren ingresar a Estados Unidos.
Menuda tarea se le hace al vecino del norte.
En este año 2020, que en realidad se reducirá a 6 meses porque en el segundo semestre se inician las campañas político-electorales para algunos gobernadores, diputados federales y alcaldes, el Presidente Andrés Manuel López Obrador deberá trabajar a marchas forzadas para cumplir con los múltiples compromisos que les ha puesto fecha de entrega a los mexicanos.
Un Presidente como el que tenemos –muy ambicioso– no se reconcilia con las evidencias de sus errores.
Con una reforma judicial huérfana, con un populismo penal, con muchos sueños rotos y con la evidencia de corrientes encontradas en el seno del gabinete, en general en la 4T iniciamos un año bisiesto aferrándonos a la idea de ¡un México mejor!
¡Digamos la verdad!