La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Como buenos extremos coinciden en la misma causa: darse en la madre
Al parecer, la relación del presidente López Obrador con la Confederación Patronal de la República Mexicana se encuentra, sino es que rota, muy maltrecha.
En su cuenta de Twitter, Gustavo de Hoyos, dirigente nacional de la COPARMEX, anunció que el priista Javier Lozano se incorporaba como ‘Vocero Especial para la defensa del Estado de Derecho’, en virtud de que las decisiones del gobierno de México ‘están comprometiendo la vigencia de las instituciones democráticas y republicanas’.
El trato mutuo que se dispensan el tabasqueño y los empresarios nunca ha sido bueno, aunque hasta ahora, más allá de los dardos envenenados de las mañaneras, ha sido institucional, sin embargo…
Sin embargo, el que la patronal incorpore a sus filas a un ‘rudo’ como Javier Lozano Alarcón, no son buenas señales, implica un endurecimiento en el discurso, porque el ex vocero de Pepe Toño Meade, es un fajador nato, hábil en el debate. Valga la comparación, es la versión fifí de Noroña, le atraen los reflectores y si le cantan el tiro le entra.
Por lo pronto, de mantenerse el nombramiento de Lozano, podemos olvidarnos de una tregua política en el contexto de la pandemia. Mientras a unos el COVID19 les cayó como anillo al dedo a otros como soga al cuello, así pues, la rebatinga, de cara al 2021, sigue.