Carlos Navarrete, diputado local de Encuentro Social en Sonora, está promoviendo la invasión ilegal de terrenos que forman parte del derecho a la vía del ferrocarril en Cananea, Sonora, sin pensar en las consecuencias que eso podría traer.
Este diputado saltó a la fama cuando declaró que la epidemia del Covid-19 no existe y que un té de canela puede curar cualquier síntoma de esta enfermedad.
Con esas credenciales, que muestran que no le interesa el bienestar de las familias, este legislador del PES está promoviendo la construcción de casas en estos terrenos federales. Medios de comunicación han documentado que se trata de un área de tres kilómetros en las que incluso, se observa que están cavando para cimentar las viviendas.
Las casas se están instalando, desde el fin de semana pasado, en la zona que comprende desde las colonias Estación, Petróleo, Leyes de Reforma y El Dorado de Cananea y algunas están sobre las vías.
Cabe señalar que el tren pasa hasta cuatro veces al día, con insumos y materiales de la industria de la región.
Para delimitar sus “terrenos” los invasores usan malla de alambre y de púas, además con cal “escriben” el nombre de “propietario”. Ante ello, las autoridades municipales les informó del riesgo que corren y los invitó a retirarse de la zona sin que hayan obtenido una respuesta.
Es obvio que el diputado Navarrete no tiene en su memoria las tragedias que ocurrieron en Torreón, hace 10 años y que le costó la vida a tres niñas, ni en Ecatepec, cuando hace dos años, un vagón se impactó contra una vivienda y causó la muerte de cinco personas.
Tampoco está considerando que la epidemia de Covid-19 está en su momento más álgido y los contagios están creciendo exponencialmente. Es una pena, que no esté pensando en sus representados y solo quiera sacar provecho y llevar agua a su molino.
¿Cómo va a actuar la autoridad federal? Alguien tiene que poner un alto, porque está en riesgo la vida de muchas personas. Es una locura del legislador y también debería haber consecuencias.