Sin argumentos, balbuceando que uno más dos más tres más cuatro más cinco es evidencia suficiente para demostrar que AMLO quiere que este país esté jodido y empobrecido, Héctor Aguilar Camín quiso convencer a un grupo de compañeros que debían unir fuerzas para descarrilar el proyecto de la 4T, hasta el extremo de aconsejar hablar en cortito con ministros de la suprema corte, los que pudieran, para convencerlos de tirar todas las iniciativas del ejecutivo.
Y hablaba de que AMLO tenía perdida la batalla en el “círculo rojo” término muy utilizado en el sexenio de Vicente Fox para identificar al grupo de intelectuales, analistas, editorialistas, columnistas y líderes de opinión críticos a su gobierno, para alguien que escribe de lastres del pasado que debemos superar, eso de círculo rojo me suena, en términos usados por ellos, un poco “trasnochado”.
Estos personajes se quedaron con una parte de la frase de Umberto Eco que reza, “Las redes sociales le dan el derecho a hablar a legiones de idiotas”, pero nunca toman en cuenta o tal vez desconozcan que antes de dicha sentencia, Umberto Eco dijo “Hay quien llega a sostener que Auschwitz no habría sido posible con internet, porque la noticia se habría difundido viralmente”.
Y me parece que de las dos partes la de Auschwitz se acomoda muy bien a México; porque lo de la legión de idiotas ya los teníamos en nuestro país desde antes, en la televisión, los periódicos y la radio; seres, muchos de ellos, que gracias a una amistad, a un familiar o a cambio de favores sexuales consiguieron espacios en esos medios de comunicación y a base de recetárnoslos hasta el cansancio en todos los espacios, fueron bautizados como nuestros intelectuales, expertos, analistas, todólogos pues.
De esta manera en México, nos recetaron durante años un grupo de personajes líderes de opinión con el mismo corte y conceptos políticos; intelectuales y locutores cómodos para el grupo en el poder y útiles para el mantenimiento del status quo que tanto le preocupaba al grupo dominante de México.
Además que al ser una comunicación unidireccional nadie podía saber la opinión de los demás, ahora con las redes sociales sabemos que hay muchas opiniones de un mismo tema, valiosas todas ellas pues parten desde el punto de vista de distintos modos de vida, eso a algunos espanta y acusan de que el país está dividido, olvídense de eso caray, el país y el mundo llevan siglos divididos pero gracias a las redes hasta ahora tienen voz para mostrar sus diferencias y ahí hay una oportunidad para mejorar las cosas con voluntad, y para muestra, lo que vive Estados Unidos después de un asesinato de corte racista a manos de un policía.
De manera que ahora que llega un nuevo grupo al poder, con nuevas ideas y que comienza a desmantelar la estructura de dichos intelectuales y líderes de opinión, los desquicia hasta el nivel de desenfreno del que ha sido testigo todo aquel que vio el video en cuestión.
Las redes sociales les han quitado la voz mandante, las redes sociales son las que en 2018 salvaron a México de otro 1988 o 2006, las redes sociales han mostrado que los que se decían intelectuales no son más que prostitutas de las letras que por yates, mansiones o terrenos en Quintana Roo, se venden al mejor postor. Para bien o para mal, son ahora las redes sociales los círculos rojo y verde juntos.
Pero después de todo vivimos una democracia que permite que personajes salgan a gritar su descontento por la comodidad perdida y que logren convencer a otros de sus planes de golpeteo al gobierno; lo que me parece un poco irresponsable es convencer en plena pandemia de salir a realizar una manifestación, aunque sea en automóvil, repito, están en todo su derecho, pero me parece que esperar a que pasara la crisis sería mejor, después de todo si lo hicieron en autos, en sábado y después de la comida demuestra que bien podía ser en otro momento.
México ha demostrado hasta ahora ser un país que en los momentos de crisis podía hacer a un lado las diferencias ideológicas para salir adelante sin que eso significara ceder ante el pensamiento contrario; por fortuna las imágenes de la manifestaciones de este sábado confirmaron que eran una minoría los mexicanos que se han dejado manipular por ese mensaje de odio de los “intelectuales o líderes de opinión” o bueno, no seamos mal pensados, tal vez como vieron actual lo de los autocinemas, a algún mirrey tipo el “Javi” se le ocurrió la maravillosa idea de una auto-marcha y pum!! tumbamos a AMLO hue. “Se hubieran esperado tantito hue”.
Naah! la verdad que ni eso tuvieron de original, fueron a copiar la idea de la derecha golpista e irresponsable española que hizo lo mismo hace unos días y por lo que fue criticada en todo el mundo, pero aquí seguro se juntan más coches en unos tacos del “after” que los que juntaron en su auto-marcha.
Esta semana nos enteramos que Wal-Mart, Coca Cola FEMSA, IBM y Slim pagaron miles de millones de pesos en impuestos, tal vez a algunos ya les cayó el veinte, a la fuerza quizá, que la estrategia seguida por AMLO es la mejor hasta para sus negocios.
¡Señor@s, analicen, en un país con tantas carencias y con tanta desigualdad, 60 días de cuarentena sin saqueos y destrozos es una hazaña!
Los grandes empresarios son personajes volátiles y acostumbrados a mandar, pero antes que otra cosa son comerciantes, y lo que les preocupa realmente es que sus negocios funcionen. No como otros, que están perdiendo su capacidad de influencia “por pendejos y por petulantes”.
Y a los extraterrestres, primero investiguen, después opinan.