La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Como mafiosos, veremos si los atracomucho aplican la omertá, uf, uf y recontra uf
Emilio Lozoya Austin, decidió allanarse a ser extraditado a México, porque de acuerdo a los trascendidos, su padre Emilio Lozoya Thalmann, logró un acuerdo con la Fiscalía General de la República: Emilito dice todo lo que sabe y obtiene una condena menor.
En términos legales, dicho convenio es válido. Es un mecanismo, digamos, para buscar atrapar a los verdaderos ‘peces gordos’ detrás de un delito, aunque el señalado, no es precisamente un charal.
Al sentirse traicionado por sus antiguos aliados (Enrique Peña, Luis Videgaray, Pedro Joaquín, etc.), el ex director general de PEMEX, habría resuelto no ‘comerse’ solo la imputación y lograr atenuantes, por lo tanto, decidió delatar a sus cómplices en el daño patrimonial a la paraestatal y en los sobornos de la multinacional Odebrecht.
El asunto se pondrá candente y veremos hasta donde está decidida a llegar la 4T, si estiran la liga, el fuego puede llegar a los aparejos del ex presidente Peña.
Para cerrar la pinza, otros de los ex colaboradores del peñato, está más que dispuesto a perseguir a su ex jefe: Santiago Nieto, actual titular de la Unidad de Inteligencia Financiera.
Ante la falta de pan, don Andrés tendrá que recurrir al circo, pero que los saqueadores sean castigados, es algo que en cualquier circunstancia se agradece: ¡a por ellos!