HORIZONTE DE LOS EVENTOS.
El Sr. Presidente es un hombre que no se deja cuidar, en términos de seguridad personal. Y eso me preocupa, dadas las transformaciones que realiza y que pretende, en lo que toca intereses poderosos y arraigados, que atávicos ponen en riesgo el proyecto.
Me pregunto si en términos de nación, no sufrimos el mismo descuido. Continuaré brevemente, atendiendo a los del Río Grande. Pero en realidad hay detractores más poderosos que aguardan alertas, a la oportunidad desdichada de dar un golpe.
No tengo mayor información, lo hubiera ya denunciado pero no es difícil sumar dos más dos. Estuve cerca de Luis Donaldo y se lo que es perder un hombre: Ojo.
Cuidado, porque el señor Presidente le da tanta importancia al peligro del contagio por covid, que al agitador discurso separatista de algunos gobernadores, gobernantes y otros políticos de sus estados.
Sí creo que estén manipulados y a dos pulgadas del suelo patrio, convencidos del canto de los sirenos, que como se sabe, cantan bello pero no con la verdad: “subes tu popularidad y además, te caerá dinero” -a los estados y municipios endeudados por ellos mismos, cuando presidieron los Ayuntamientos…
Unir es muy difícil: para los 70 años de paz priista, requerimos todo el siglo XIX y 30 años del s. XX de guerras contra potencias extranjeras que nos sabían pobres, ignorantes y divididos y perdimos más de la mitad del Territorio y guerras entre mexicanos que no aceptaban esa unión. El lector calculará por qué preferían y prefieren algunos, la desunión.
¡Eso nos enseñó Juárez! Con varias lecciones dolorosísimas, como fusilar a un hombre, o a cientos pero por qué costo: Tomemos conciencia ¡Pero ya!
Mi padre me enseñó que las relaciones humanas (la historia, vale decir) “son más exactas que las matemáticas”. A quien se asombre, es la explicación del por qué Reyes Heroles sentenció que “quien desconoce la historia, está condenado a repetirla”, pues efectivamente, lo que el hombre hace por primera vez, nos enseña la historia, volverá a repetirlo.
Samuel, en Nuevo León, es otro gran protagonista que reta al gobierno federal, él que descansa desde hace años y como político, su escaño en el Senado, a Luis Donaldo hijo, no ha Dante ni al MC, y con su protagonismo berrinchista, quiere justificar ser candidato a gobernador, aunque en verdad va a ser candidato y ganará gracias al nombre del Colosio Riojas, que será Alcalde de Monterrey.
Empero, no omito señalar, como cerebro adjunto que fui de Luis Donaldo, afirmo que el “pelo chino”, jamás permitió ni toleró un discurso así. Por lo que considero que en ejercicio de lealtad con su nombre, que de ninguna forma es suyo todavía, deberá desmarcarse de su cuate y socio, o pararlo, sería mejor y más “colosista” de su parte. Ojalá no sea demasiado tarde.
Ni tengamos que recordarlo como un Juan Nepomuseno Almonte.
No chuparse el dedo es importante al debatir argumentos que nos han llevado a la guerra y la desintegración nacional. No se vale decir “no está diciendo eso, como si el lenguaje no fuera tan exacto como las matemáticas. Que, de romper el Pacto Fiscal, hay un paso para romper el Pacto Federal.
Imposible justificar su inacción y permisibilidad, hablo de todos ellos, hasta Jalisco, Durango y Michoacán, acaso Chihuahua, diciendo que no llaman al separatismo, sólo a la reforma del Pacto Fiscal, pues Samuel advierte en su propuesta que si la Federación no acepta 60, con 30 para el estado y 10% a los municipios, el estado cobrará los impuestos y luego los enterará a la Federación, lo que implica por principio, la invitación al desacato de la Constitución que para asumir su investidura de Senador, PROTESTÓ CUMPLIR.
Recuerdo que en marzo de 1990, becado por él, yo en Madrid, le informé al Senador Colosio que Lituania había proclamado su “independencia financiera” de la Unión Soviética, que dos años después se desintegró.
Gorbachov fue tolerante con el pequeño estado (“tocaron pendejo” dicen en Sinaloa) y pronto estados soviéticos de la URSS, donde la Federación tenía armas nucleares, se independizaron siguiendo el precedente lituano, amenazando y secuestrando al líder del Soviet Supremo y su gobierno, nuclearmente.
Luego otros estados con reservas alimentarias, negociaron el retorno a la Federación de granos y otros alimentos, lo que trajo hambruna y otros desequilibrios también en los estados pobres, que, por falta de recursos y nula gobernabilidad política, la URSS terminó pronto, en menos de 20 meses, aceptando la independencia también de los pobres. Y su desintegración.
Lo comenté entonces a mi Presidente Colosio, no como noticia internacional sino porque México vivía entonces una gran reforma del Estado, en la que Luis Donaldo tuvo una participación de liderazgo en el sentido de muchas de las transformaciones del Estado Mexicano.
Recomendé entonces, aprender de Gorbachov que tolerar la Proclama de Lituania, desembocaría inevitablemente en la desintegración de la segunda potencia del mundo. No era profética mi afirmación, sino previsible, y que antes de hacer la Reforma, deberíamos saber qué pilar pondríamos en lugar del que quitáramos.
Ya he advertido que el proceso de supresión del sistema priista iniciado por de la Madrid, que concluyó Salinas, estableció en definitiva el neoliberalismo, es un proceso que no ha terminado en México, para nada: nuestra experiencia ha cubierto todas las etapas que la URSS, en dos años, y el bloque soviético ¡en una semana! hubieron de transitar hasta la desintegración del régimen, incluso, la desaparición de algunos países:
La Reforma del Estado mexicano lleva los mismos pasos, sólo que en 30 años: Todo comienza por la proclamación de un miembro federativo, de la Independencia Financiera.
México incluso, inició un año antes, el 87, con la desaparición del Partido Comunista, por los mismos motivos, sólo que aquí no gobernaba. Pero la elección del 88, fue una experiencia que transformó para siempre el régimen priista.
De hecho de la Madrid y Salinas, ambos, ninguno era priista, sino usurpadores de la estructura revolucionaria, que accedieron al poder, para arrebatarlo en favor de los intereses extranjeros y para ello, desmantelar constitucional y estructuralmente TODO el Sistema Político Mexicano. de la Madrid llegó el 82, Gorbachov el 85 (!).
Se dice que el ruso era agente de la CIA y don Miguel estudió en Harvard. Paralelismos que no son casualidades -no nos chupamos el dedo, ¿verdad?
La supresión de los Estados comunistas soviéticos, se configuró con la desaparición de los Partidos Comunistas gobernantes.
Con el exterminio del régimen de la Revolución Mexicana se nos privó para siempre de la posibilidad de que accediera al poder un estadista patriota. El último suspiro fue Colosio Murrieta y por eso lo mataron.
No regateo a de la Madrid ni a Salinas de Gortari la calidad de estadistas, pero claramente no fueron patriotas y las consecuencias de sus transformaciones, son más que evidentes que no fueron en favor de la Patria, sino de un grupo bastante bien definido, con el empobrecimiento del pueblo y el adelgazamiento del Estado, en realidad le restó herramientas de control interno y de defensa al exterior al Estado, hasta que hoy, poco o nada puede hacer el Presidente, ya no digo de capacidades de Estadista, ni siquiera de policía pueden hacer nada.
Y esto vale perfectamente a los anteriores cuatro presidentes, que continuaron con los principios neoliberales y con la progresiva evidencia de debilitamiento del estado, de mayor empobrecimiento, y del crecimiento de los enemigos de cualquier estado, la economía informal y paralelamente, la aparición y desarrollo de sectores que pasaron a la franca operación delincuencial.
Pero ante estas evidencias ¡Por 26 años! Siguieron convencidos de sus dictados. Hoy tenemos un Presidente que denuncia ese lamentable proceso pero que en términos de empleo, inversión pública, crédito para el desarrollo, salarios y salarios indirectos y en materia de reformas legales y constitucionales, aún procede como Reagan: neoliberal. Trump lo ha radicalizado.
Ahora bien, es permisivo con los desafiantes políticos anti federalistas, que han radicalizado contra los principios liberales (los revolucionarios ya no existen), que son los que sostienen la existencia de México. Simultáneamente debe prepararse al Estado, para sus supervivencia.