Actualmente es importante aprender a comer, por ello hay que agregar a la dieta alimentos que además de aportar carbohidratos, proteínas y grasas, contengan antioxidantes que proporcionen y estimulen el sistema inmunológico para prevenir cualquier tipo de enfermedad.
Con la exposición a sustancias tóxicas propias del ambiente, como el humo del tabaco y la radiación, el cuerpo se va degradando y produce lo que se conoce como radicales libres. Los radicales libres dañan las células y, juegan un papel importante en el desarrollo de enfermedades como el cáncer, problemas del corazón y artritis reumatoide. Te decimos cómo integrar los antioxidantes en tu dieta.
1. Las vitaminas C y E, son dos antioxidantes que se encuentran en las fresas, brócoli, toronjas, naranjas, kiwis, mangos, tomates, zanahorias, acelgas, espinacas, calabaza, papaya y mostaza.
2. Los beta-carotenos son antioxidantes que disminuyen los síntomas de asma, previenen enfermedades del corazón, cataratas y degeneración macular senil. Están presentes en las zanahoriras, espárragos, betabel, chabacanos, duraznos, mandarinas y tomates.
3. Otros antioxidantes que fortalecen el sistema de defensas son los minerales como el selenio, que se encuentra en el atún, carne de res, pollo, y el zinc, presente en mariscos, carnes rojas, frijoles, nueces, granos integrales y lácteos.
Incluir antioxidantes en tu dieta es muy fácil, sólo elabora menús semanales para preparar ricos platillos que te permitan estar en forma, más fuerte y con un sistema inmunológico más fortalecido para defenderte ante el ataque virus y bacterias.