Ciudad de México-. Se realizará una inversión de 2 mil 640 millones de dólares para concluir las obras de instalación de la planta coquizadora en la refinería de Tula con miras a alcanzar la autosuficiencia en gasolinas en el año 2023. Además, Petróleos Mexicanos (Pemex) renegociará los contratos de las plantas de hidrógeno de las refinerías de Tula y Madero, vendidas a privados en el sexenio de Peña Nieto, con miras a recomprarlas.
El Director General de Pemex, Octavio Romero Oropeza, informó lo anterior en la conferencia mañanera de hoy. Sobre la coquizadora de Tula señaló que se empezó a construir en 2014, pero en 2016 se suspendió la construcción. Ahora, el Presidente López Obrador ha decidido no dejar tirado el proyecto, sino reactivarla para cumplir su promesa sobre autosuficiencia en gasolinas, afirmó.
Así, la coquizadora de Tula, al operar, procesará el 90 por ciento del combustóleo que se produce en Tula y Salamanca, con el fin de volver más rentable el procesamiento en esas plantas, ya que en la actualidad Pemex pierde dinero en el procesamiento de crudo que se convierte en combustóleo.
Al procesar el combustóleo que se produce en Tula y Salamanca, se generarán 140 mil barriles diarios de combustibles, de los cuales 42 mil serán de gasolinas, 78 mil de diésel y 20 mil de turbosina.
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— Andrés Manuel (@lopezobrador_) May 12, 2021
El director de Pemex también explicó que se buscará recomprar las plantas de hidrógeno, que son de gran importancia para las refinerías al eliminar azufre y nitrógeno del crudo en la producción de combustibles limpios.
“En el gobierno anterior se tenía la intención de vender las plantas de hidrógeno de las seis refinerías, sólo alcanzaron a vender las de Tula y Madero. Vendieron la de Cadereyta, pero alcanzamos a cancelar esa venta”, dijo.
Derivado de la venta de la planta de Tula a Air Liquide, Pemex obtuvo cerca de 53 millones de dólares. Sin embargo, debido a que se requerían los servicios, el gobierno comenzó a rentarla y, durante tres años y medio, se ha pagado cerca de 49.3 millones de dólares, el 94 por ciento de lo que recibió por su venta.
“A todo esto se suma que el contrato fue hecho por 15 años, por lo que se deberá pagar 261 millones de dólares por la renta”, informó.
En el caso de la refinería de Madero, la compañía Linde pagó 32.5 millones de dólares por ella, y posteriormente se hizo un contrato de renta por 15 años. Hasta el momento se ha pagado 27.5 millones de dólares por la renta en tres años.