Por Fernanda Sandoval
Las pasadas elecciones fueron un sacudón pero no necesariamente para la población, sino para MORENA. Individualmente formamos parte de una burbuja selecta de la realidad, en ella nos desenvolvemos virtualmente (en algunos casos, también es presencial); independientemente de la burbuja a la que pertenezcamos sabíamos lo que iba a pasar. Desmenuzando un poco los resultados, no es difícil analizar los factores que tuvieron como consecuencia lo que vimos.
Inicialmente, podríamos creer que la población castigó a AMLO y a MORENA. Y seguramente así fue, pero con los mapas elaborados por el usuario detwitter @ElenoAM con la información emitida por las PREP del INE, vemos que donde hubo mayor nivel de participación social (https://twitter.com/ElenoAM/status/1402098305090441218?s=19) , la coalición PRI-PAN-PRD ganó por encima de MORENA.
No, no es cuestión de clases (hay que aclarar porque el clasismo en México no perdona).
Es castigo. En otro mapa del mismo autor (https://twitter.com/ElenoAM/status/1402638937332531201?s=19) , se observa la diferencia de votación por MORENA en el 2018 y 2021, la sección izquierda de la ciudad fue quien más modificó su voto. No dudo que exista mucha gente afín al PRI-PAN-PRD, porque en la CDMX hay de todo, pero siendo realistas no es la mayoría. Basta con recordar cuanta gente estuvo feliz cuando MORENA obtuvo la presidencia.El país quería un cambio, anhelaba un cambio, y se aventó el volado.
¿Funcionó? No, no del todo. ¿Eso significa que preferimos al PAN? Eso ni el PAN se lo cree. Volviendo al voto de castigo, mucha gente que votó por MORENA en el 2018 prefirió votar por la coalición-o por alguno de los partidos dentro de ella- pero para moverle a MORENA, para que MORENA sepa que la gente está enojada y que, así como la gente votó por ellos, así de fácil se acaba. No creo que esa fuera la solución al problema, pero entiendo el punto y para nada juzgo ese punto de vista.
Por otro lado, enumeremos algunos de los errores. El Presidente cree que fue por una campaña sucia en su contra, pero esas campañas siempre han existido y sífuncionarán pero no a un nivel mayúsculo, de haber sido así dudo que hubiéramos tenido mínimo a los dos presidentes anteriores. Pero no, se equivoca, no se trata de una campaña sucia en su contra para sacarlo del poder, es porque no está haciendo las cosas bien. Y no tiene que aceptar que se está equivocando en televisión nacional -que si lo hiciera, callaría muchas bocas-, pero perfectamente puede aceptar
internamente que la está regando, que no está funcionando, evitar el narcicismo y cambiar a lo que la gente votó en el 2018. Eso le ganaría la simpatía de la gente y posiblemente las siguientes elecciones cambiarían.
El metro. Ese metro ha sido un problema desde el día en que se construyó, y no hay necesidad de meterse en quién tuvo la culpa de qué. El error GARRAFAL con respecto al metro es que no hubiera culpables, porque los hubo. La simpatía ciudadana que se hubiera ganado MORENA, y en especial la Jefa de Gobierno, si hubiera cortado alguna cabeza, a lo mejor hubiera modificado un poco los resultados de la elección. No nada más porque cortar cabezas era lo justo y lo que se debía hacer, por encima de eso, pudo ser una táctica política bien hecha. Y perdieron la oportunidad.
El último punto: las feministas. ¿De verdad cree el PRI-PAN-PRD que ganaron por mayoría? Ninguna feminista votaría por partidos manchados de sangre de mujeres, de niñas, cargando desaparecidas, o pro-vida (anti-derechos). Las feministas anularon su voto, llenando las boletas con nombres de desaparecidas, de víctimas de feminicidios; las feministas no votaron porque nadie era opción. Partidos chicos como los que hoy ya perdieron su registro, tampoco eran opción. Y hago un espacio para mencionar al partido anti-derechos del PES. Las feministas no son un grupo chico, marginado, calladito. Son un grupo grande de mujeres que han vivido las injusticias y están enojadas, por lo que un gobierno que atente contra sus derechos jamás será su opción.
Me parece que hacer las cosas bien con respecto a temas de género es lo que por mínima decencia humana se debe hacer, porque es inconcebible que haya 9 víctimas de feminicidio diarias. Pero ya que no parece ser obvio, tal vez por votos y mero interés podrían hacerlo.
En conclusión, MORENA tiene muchísimo espacio para crecer, mucho espacio donde cambiar. La ciudad sabe que no se trata de poner en el poder al diablo conocido porque es mejor que el diablo por conocer, y eso queda sumamente claro. Es momento que se vuelvan ese partido por el que votamos, que el Presidente se vuelva humilde con sus errores, que acepte cuando trae machismo arraigado y cambie. Cambiar el gobierno hacia perspectiva de género, no nada más llenar asientos con mujeres que mantienen la misma idea patriarcal que los hombres ahí dentro. Aquí no estamos juzgando gente por lo que tiene metido en su ser porque “así los educaron”, pero sí se juzga cuando no se interesa cambiar y llevan 9 mujeres diarias asesinadas cargando.