Francisco Gómez Maza
• En mayo de 2021, superávit d 340 mdd
• En mayo de 2020, déficit de 3 mil 462 mdd
Dice el texto del reporte de los gurúes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), confirmando el espléndido comportamiento del sector externo, particularmente, en este caso, del comercio exterior de México:
“La información oportuna de comercio exterior de mayo de 2021 indica que se registró un superávit comercial de 340 millones de dólares, saldo que se compara con el déficit de 3 mil 462 millones de dólares, obtenido en igual mes de 2020.
(Y) En los primeros cinco meses de este año, la balanza comercial presentó un superávit de 333 millones de dólares.
Qué impresionante diferencia entre los mayos de 2020 y 2021: De un multimillonario déficit comercial, el año pasado, a un superávit, aun modesto, pero que significa un brinco histórico.
En medio de la pandemia, este escribidor creyó que a este barco de la economía se lo llevaba una arrasadora corriente; otros, los de la primera clase, los que hablan “por todos los mexicanos”, a pesar de que son detestados por las mayorías, desearon con toda su fuerza que sí se llevara Patetas a la economía para hacer notar el rotundo fracaso de “López”.
Pero mire cómo son las cosas. Se apuraron aquellos empresarios que tienen su fe en el comercio exterior y que no piden ni esperan tratos de excepción, como los tenían con los gobiernos “de la revolución” interrumpida, traicionada. Y la están haciendo, como decimos en lenguaje coloquial los chilangos de los barrios bravos de la Gran Tenochtitlan.
El Inegi es puntual en sus cuentas: Primero da cuenta de lo que las empresas dedicadas al comercio exterior le vendieron a sus socios.
Veamos:
En el pasado mes de mayo, el valor de las exportaciones de mercancías alcanzó 40 mil 798 millones de dólares, cantidad compuesta por 38 mil 526 millones de dólares de ventas no petroleras, principalmente manufacturas y productos primarios; y por 2 mil 272 millones de dólares de ventas petroleras. Esta última cifra no está mal, pese a la situación financiera de quiebra en la que Peña Nieto y antecesores dejaron a la que llamaron “empresa productiva del Estado”.
Así, dice textualmente el informe de los muchachos de Julio Santaella, presidente del instituto, en el mayo pasado las exportaciones totales mostraron un aumento anual de 125.2%, el cual fue resultado de incrementos de 124.5% en las exportaciones no petroleras y de 137.9% en las petroleras. Al interior de las exportaciones no petroleras, las dirigidas a Estados Unidos avanzaron a una tasa anual de 124.6% y las canalizadas al resto del mundo lo hicieron en 124 por ciento.
Con series ajustadas por estacionalidad (ya hemos explicado infinidad de veces que es estacionalidad), en mayo de 2021 las exportaciones totales de mercancías reportaron un incremento mensual de 1.20%, el cual fue resultado de la combinación de un aumento de 1.31% en las exportaciones no petroleras y de una caída de 0.72% en las petroleras.
Las cifras de las importaciones, en contrapartida, revelan que, en el pasado mayo, su valor fue de 40 mil 459 millones de dólares, monto que implicó un aumento anual de 87.5 por ciento. Dicha cifra fue reflejo de crecimientos de 80.8% en las importaciones no petroleras y de 184.1% en las petroleras. Y al considerar las importaciones por tipo de bien, se observaron ascensos anuales de 116% en las de bienes de consumo; de 89.4% en las de bienes de uso intermedio, y de 43% en las de bienes de capital.
Las importaciones totales (desestacionalizadas) mostraron un crecimiento mensual de 4.22%, que se derivó de alzas de 2.64% en las importaciones no petroleras y de 19.93% en las petroleras. Por tipo de bien, se presentaron avances mensuales de 16.65% en las importaciones de bienes de consumo, de 2.50% en las de bienes de uso intermedio y de 3.06% en las de bienes de capital.
Así que, si le dicen, vamos al comunismo… Bueno. Qué puedo decirle. Se necesita ser un caradura para no aceptar la verdadera realidad y ponerse a inventar las famosas fake news en busca del embute.