* Como consejero de Pemex en el sexenio de Enrique Peña Nieto, el hoy diputado de Morena, ahora transformado en “adalid” de la lucha contra la corrupción, avaló en su momento la fraudulenta operación que tiene tras las rejas a Emilio Lozoya, por lo que junto con el ex Secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell debería responder al país sobre el cuantioso quebranto antes de ambicionar la gubernatura de Hidalgo
SILOGISMOS
Por Antonio Ortigoza Vázquez / @ortigoza2010
Especial de Expediente Ultra
Cuauhtémoc Ochoa fue uno de los cinco consejeros propietarios de Pemex señalados en el fraude con la compra de Fertinal, donde solo fue acusado el director general de la paraestatal, Emilio Lozoya Austin; adicional a eso, como subsecretario de la secretaría del Medio Ambiente fue señalado en fraudes escandalosos en Puebla y otros delitos.
Sin embargo, después de fracasar en 2018 como candidato de la coalición “Todos por México” entonces oficial a diputado, ahora está en San Lázaro como legislador de Morena, desde cuya tribuna despotrica contra “la corrupción de los gobiernos neoliberales”.
Como otro de los beneficiados por la justicia selectiva imperante (si acaso), también figura como uno de los más de 50 registrados para candidato por Morena a la gubernatura de Hidalgo.
Cierto: “chapulines”, “maromeros” y saltimbanquis siempre los ha habido en la grilla nacional, pero la novedad en la 4T es la amplísima manga ancha con que asimila a sórdidos personajes con kilos de expedientes judiciales congelados
UNA ABOGADA CON VISIÓN RESTRINGIDA
El cinco de marzo de 2019, la licenciada Martha Edith Rodríguez Acosta, en su calidad de apoderada legal de Pemex y Pemex Fertilizantes, solicitó oficialmente a la Fiscalía General de la República “actos de investigación, medidas de protección, providencias precautorias y medidas cautelares; acceso a registros de investigación e incluso recibir toda clase de notificaciones, aún las de carácter personal, documentos y valores” a la suscrita y una lista de 17 “asesores jurídicos”.
El documento (cuya copia obra en poder de “Expediente Ultra“), señala directamente que “en cuanto hace al Consejo de Administración y al director general de Pemex”, Emilio Lozoya Austin, son señalados (en plural muy claro): “… transgredieron la obligación legal, consistente en que, en el desempeño de sus funciones, deben buscar, en todo momento, con imparcialidad y en beneficio y el mejor interés de Pemex”.
Acto seguido, Rodríguez Acosta señala al Consejo de Administración de “uso indebido de atribuciones y facultades”,
Señala la funcionaria que se compró la empresa Fertinal a un precio superior (193 millones de dólares) “al que pudo haberse pagado, tomado en cuenta la diferencia entre el valor de los activos de la empresa, de 597 millones de dólares, frente a los pasivos de 582 millones de dólares, lo que arroja un valor neto de 15 millones de dólares, como el precio que pudo haberse pagado, en lugar de los 200 millones de dólares”.
Agrega el documento que “Fertinal tenía la práctica de revaluar sus activos con una sobrevaluación no soportada por la realidad”.
“El 26 de octubre de 2015 —abunda la apoderada legal— el Consejo de Administración de Pemex. en sesión extraordinaria, se aprobó el proyecto para financiar y concretar la compra de Fertinal, hasta por 635 millones de dólares”.
El acta respectiva fue firmada por los consejeros: Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía; Emilio Lozoya Austin, director general de Pemex; Rogelio Garza, subsecretario de Comercio; Cuauhtémoc Ochoa, subsecretario del Medio Ambiente y María de Lourdes Melgar Palacios, subsecretaria de Hidrocarburos de Sener.
El documento señala así mismo a los consejeros independientes, aunque no deja del todo claro si también incurrieron en responsabilidad legal, porque no especifica el sentido de su voto: Jorge José Borja Navarrete, Alberto Tiburcio Celorio y Francisco Pastraña Pastrana.
Como ya es público, notorio y escandaloso, de todos los señalados en el documento de Rodríguez Acosta, que el único acusado y enjuiciado por los delitos señalados, es el ex director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, quien gozó de trato preferencial y privilegiado y solo unas fotos difundidos por una periodista en un restaurante de lujo hizo que fuera encarcelado.
Mientras tanto, Cuauhtémoc Ochoa ha paseado su inverecundia con total impunidad: en 2018 fue candidato de la coalición “Todos por México” a diputado federal, pero perdió. Se fue a Morena y este año logró la postulación a diputado y ganó.
Con el camino más o menos despejado, se registró como precandidato a gobernador, lo que, si acaso fuera necesario, confirma una vez más que en Morena no importan antecedentes hamponiles públicos y notorios, sino simplemente la declaración de “obediencia ciega” y nada más.
OCHOA VOCIFERA CONTRA “LA REFORMA PEÑANIETISTA”
Con el estilo típico de los gesticuladores a lo largo de la historia, converso a la Cuatro T, el diputado Ochoa, ahora se pronuncia de manera estridente contra la reforma eléctrica de 2013, la misma que reforzó, apoyó y justificó en su calidad de subsecretario en el sexenio de Peña Nieto. Con ese giro de 180 grados sabe que se le toma en cuenta en Palacio Nacional, porque nada que regocije más al tabasqueño que el espectáculo de los que se arrodillan y suplican perdón a sus desviaciones del pasado.
Sus declaraciones solo provocan risas entre propios y extraños por lo grotescas, pero no importa, en tanto se tome nota de su decidida conversión hacia “el lado correcto de la historia”. Así, declara en forma tronante que “la reforma eléctrica de Peña Nieto fracasó rotundamente, favoreció a unas cuantas empresas con ventajas desmedidas permitiendo que siguiera la corrupción imperante en el sector petrolero y el país”.
De la misma forma, pretende dar por olvidados sus abyectos elogios vertidos hacia el gobernador Omar Fayad Meneses, de quien dijo “ha colocado a Hidalgo como un referente en muchos rubros y colocado a la entidad como vanguardia en materia de mejora regulatoria, atracción de inversiones, tanto nacionales como extranjeras, la generación de empleo para egresados universitarios y ha mejorado sustancialmente el sistema de salud”.
Y HACE TRES AÑOS FUSTIGABA “A LOS CHAPULINES”
Apenas el 18 de mayo de 2018, cuando era candidato de la coalición oficialista con PRI incluido, fustigó “a los políticos mentirosos, que por muchos años han engañado a la gente, y que son capaces de saltar de un bando a otro, con tal de seguir en el candelero cual ‘técnica de usurpación dentro de los partidos'”.
También por esas fechas era furibundo detractor “de los cacicazgos” y en específico “del pequeño grupo que se ha apropiado históricamente de la UAEH para fines políticos partidistas…”
EL “FRAUDE PERFECTO” EN LA PLANTA DE CHOLULA
En 2016 fue inaugurada en San Pedro Cholula, Puebla, la planta de tratamiento de residuos sólidos, con recursos del estado y la Semarnat donde fungía como subsecretario. Surgió de pronto la empresa PRO-FAJ, la que en licitaciones irregulares -por decir algo- obtuvo contratos por 30 años en 23 ayuntamientos, y en algunos ya se denuncian clausulados leoninos contra los municipios y ahora exigen los ediles que se cancelen.
Los denunciantes señalan que PRO-FAJ hizo el “fraude perfecto”, en terrenos de cinco hectáreas donados por el gobierno estatal y parte de la maquinaria, Semarnat destinó 80 millones para el resto del equipamiento.
Así las cosas, con todo ese récord en su haber, Cuauhtémoc Ochoa es uno de los innumerables aspirantes registrados a la candidatura de Morena para gobernador.
¿Ya ha sido beneficiado por la “justicia selectiva” de la 4T? ¿Se llegará al extremo de postularlo a gobernador? Todo puede ser posible en la dimensión morenista, incluso, puede ser llamado a cuentas.