Luis Farías Mackey
Cuatro cosas dejó en claro ayer López Obrador al abrir su miserable juego en la Corte.
1. No tiene los votos para sacar adelante sus tres reformas constitucionales: Eléctrica, Militar y Electoral.
2. No tiene los números para transitar mediocremente por la farsa de revocación, por lo que no podía permitirse el descalabro de una declaratoria de inconstitucionalidad a días de ella. Al costo, incluso, de la propia Suprema Corte de Justicia de la Nación.
3. Es capaz de acabar con México con tal de imponer su desmesura; y
4. No respeta democracia, ciudadanía, Estado de Derecho y hasta la ley de la gravedad.
Lo que está por verse es si el summun de su depravación lo salva o solo acelera su paso a la infamia patria.