* No es asunto menor el que tenemos enfrente. Parece que los gobernantes y los grupos de poder, esos que verdaderamente inciden en la toma de decisiones, lo han visto con desidia, porque se han negado a analizar con detenimiento lo que realmente ocurre, e incluir en ese análisis los factores climáticos que modifican los recursos naturales, como el agua
Gregorio Ortega Molina
Recuerdo, no sin azoro, el esfuerzo que me costó aprender la organización geopolítica de África. Lo que estudié en la educación primaria ya no confirmaba lo que había ocurrido durante mis años de enseñanza secundaria.
Europa se reconfiguró al término de la II Guerra Mundial y, otra vez, con la caída del muro de Berlín. Las repúblicas bálticas, las que fueron conocidas como las socialistas soviéticas, la misma Alemania, que tiene escasos 30 años de reunificación. ¿Cuál será el saldo de la guerra en Ucrania?
Por lo pronto, como amenaza clara y ante las pretensiones de Suecia y Finlandia -de seguir los pasos del gobierno ucraniano e integrarse, de pleno derecho, a la OTAN-, además de Lituania, Letonia y Estonia, pudieran recibir idéntica trato hostil: la invasión armada.
¿Puede impedirse que Ucrania quede asimilada por Rusia, o al menos sometida económica y políticamente? Lo dudo, negociaciones irán y vendrán, el número de muertes civiles se incrementará hasta causarnos insomnio, pero el mundo está en proceso de un cambio de civilización, y para ello habrá de reconfigurarse en lo económico, lo geográfico y lo ideológico, no en lo político, los gobernantes no soltarán el poder.
Vladimir Putin está en modo José Stalin. Lo intuimos o lo sabemos. Lo que de plano desconocemos, es la razón real de este movimiento bélico. ¿Qué sucede en Rusia? ¿Hay hambruna? ¿Inquietud social y cultural entre la población? ¿Es únicamente el deseo de ser más grandes y supuestamente mejores, aunque el camino para lograrlo requiera de un adoquinado de cadáveres?
¿Qué espera obtener China de este movimiento ruso? ¿De qué manera incidirá en América, y cómo habrá de reorganizarse el poder continental de Estados Unidos? ¿Qué implica, en lo cultural, en lo civilizatorio y como fundamento religioso, un cambio de equilibrio de poderes económicos e ideológicos? ¿Cómo incidirá en el cambio climático?
No es asunto menor el que tenemos enfrente. Parece que los gobernantes y los grupos de poder, esos que verdaderamente inciden en la toma de decisiones, lo han visto con desidia, porque se han negado a analizar con detenimiento lo que realmente ocurre, e incluir en ese análisis los factores climáticos que modifican los recursos naturales, como el agua.
Insisto, estamos ante un cambio de civilización, que no se pospone con una tregua y que sólo se encaminará sin tanta muerte, al agarrar el toro por los cuernos.
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@OrtegaGregorio