Yo Campesino / ¡Que se mueran!
• Presume Ganso ahorros por casi dos billones, incluye 116 mil millones ordeñados en salud
*Miguel A. Rocha Valencia*
El desprecio por la vida de los mexicanos cada vez es más evidente en el régimen de la 4T, donde por un lado el ganso presume “ahorros” por casi dos billones de pesos, y por el otro, miles de seres especialmente mujeres y niños, mueren por el subejercicio acumulado en salud por más de 116 mil millones de pesos en tres años, de los cuáles, ordeñaron sólo en 2020, en lo más duro de la pandemia, 37 mil millones.
Ese hecho deriva en la cada vez más escandalosa escasez de medicamentos, tratamientos para pacientes con problemas crónicos de salud y terminales, así como en miles de defunciones que son reportadas por el Inegi como enfermedad, pero debido a la mala atención y suministro de los fármacos para sanar o prolongar la existencia.
De acuerdo con datos del portal Transparencia Presupuestaria de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, durante el tiempo que lleva la pandemia se acentuó la carencia de suministros, personal y atención en hospitales públicos, acumulándose el subejercicio mencionado cuya devolución a las arcas de la Tesorería se registra, pero no a qué más fueron destinados.
Como paradoja, en el discurso y el papel, los presupuestos para el sector salud aumentaron, pero al final, desde 2019, el gasto fue menor como el caso de 2020 en que el déficit alcanzó los 37 mil 940 millones de pesos, que se reflejaron en la atención a enfermos.
Por ello no es casual que la tasa de sobremortalidad para el periodo de enero 2020 a septiembre 2021 por todas las causas alcanzara, de acuerdo con el Inegi, a 653 mil 53 defunciones más de las “habituales”, en las que se apuntan las derivadas de la pandemia que ya están por arriba de las 450 mil efectivas y más de 150 mil por otras enfermedades y el incremento en los asesinatos.
En ese lapso con los datos ya totalmente metidos en estadística, en el reporte del Inegi de febrero de este año 2022, se reportó que el total de sobredefunciones en todo país superó el 50.7 por ciento más que en periodos anteriores similares. Es decir que en tiempos del mesías tropical mueren más mexicanos que en cualquier administración neoliberal.
Al mismo tiempo, la exclusión de personas del sector salud propiciada especialmente por las absurdas políticas del machuchón de Palacio Nacional, se acentúa permanentemente. La estadística (de nueva cuenta los números) dice que hoy hay 15 millones de personas más sin acceso a los servicios de salud.
No sólo eso, es ostensible que los ahorros “pegan” en la atención en instituciones como ISSSTE, IMSS, los públicos y en especial en los 12 Institutos Nacionales dependientes de la Secretaría de Salud como son el de Neurología, Enfermedades Respiratorias, Cancerología, Nutrición o Pediatría, entre los más afectados.
En los primeros, es cada vez más aguda la ausencia de medicamentos y personal de medicina interna y especialidades (segundo y tercer niveles) así como la falta de reequipamiento, dándose el caso de que hay unidades médicas carentes de rayos X o tomógrafos, por lo cual las citas se alargan por meses y los pacientes o recurren a la medicina privada, se agravan sus padecimientos a niveles críticos y en muchos casos fallecen.
Tan sólo en 2021 no se surtieron 24 millones de recetas extendidas por las principales instituciones de seguridad social, frente a los 3.5 millones no atendidas en 2017 o las 2.9 millones de 2018. Pero justo en 2019, la escasez derivada del rompimiento de contratos dizque por corrupción, inició el calvario y el sobrefallecimiento de mexicanos, ya que en ese año el registro pasó a 7.5 millones de prescripciones no surtidas y en 2020 dio un brinco hasta los 18.3 millones de medicamentos no entregados a pacientes.
De las mencionadas, únicamente en el IMSS se negó el surtimiento de más de 18 mil recetas en 2021 en tanto que en atención a la salud y medicamentos gratuitos, el ganso se “ahorró” mil 315 millones de pesos, que se tradujeron en deterioro de salud o muerte de los más pobres.
Pero eso sí, simultáneamente se dieron los “ahorros” y el incremento a los presupuestos a programas clientelares de manera sistemática a costa de la salud y muerte de miles de mexicanos.
Para dejar más claro lo que significa ese “ahorros de muerte” del profeta de la 4T es justo mencionar que no sólo se dejaron de otorgar medicamentos, sino que esos subejercicios o desvíos al presupuesto de salud se reflejaron en la cancelación de 466 mil tratamientos para niños con cáncer, se dejaron de otorgar cerca del equivalente a ocho mil millones de pesos en fármacos.
En esos “ahorros” se incluyó la cancelación de atenciones en salud por cinco mil 811 millones de pesos y lo que ya es un problema grave, es que en materia de vacunas además de las propias de Covid-19, se dejaron de aplicar dosis por el equivalente a cinco mil 100 millones de pesos.
Se acabó con la prevención y control de enfermedades y se “ahorraron” otros mil 165 millones de pesos, eliminándose entre 2019 y 2022 los presupuestos a enfermedades catastróficas como malformaciones de corazón, cánceres, tumores cerebrales, insuficiencia renal, los trasplantes de riñón, hígado, corazón, médula ósea y… las mencionadas guarderías para madres trabajadoras o personas con necesidad y mujeres agredidas, que curiosamente coincide con aumento de feminicidios.
Podría seguir la lista de ahorros que se traducen en agravamiento de enfermedades, muertes o incapacitaciones, pero para el machuchón que vive como príncipe en “su” palacio, eso no importa. Los muertos no votan, que como las instituciones, que se vayan al diablo.
Debido a todo ello, la esperanza de vida de los mexicanos bajó de 75 a 71 años ¡Gracias, señor presidente!
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