Yo Campesino / Cínico encuerado
• Evidenciado en su corrupción el ganso ríe, se sabe impune para mentir, robar y fracasar
Miguel A. Rocha Valencia
Más allá de las presunciones, está claro que el mesías tropical no le importa ser descubierto en sus mentiras ni en actos de corrupción propios o de los suyos, su cinismo supera las pruebas en su contra, los números de la realidad y cualquier crítica, comentario o denuncia.
Resulta refractario a la aplicación de cualquier norma jurídica escrita simplemente porque en la era de la 4T, él es la ley, la que aplica porque él manda, “me canso ganso” y no hay quien se atreva siquiera a alzarle la voz, enmendarle la plana, desmentirlo o quitarles una coma a sus designios. Es la imagen del autoritarismo y la tiranía no declarada en México.
La aprobación de la permanencia del Ejército en las calles donde dieron su aval algunos opositores que se veían muy bravos como Miguel Ángel Mancera Espinosa, fueron sometidos luego del “acostumbrado diálogo” del chantaje “cooperas o cuello”, no fue sino el reconocimiento del fracaso de la construcción de la Guardia Nacional y la fallida estrategia de “abrazos, no balazos”.
Coincidentemente se da a conocer la indagatoria sobre la hija de Manlio Fabio Beltrones por depósitos de 10 millones de dólares en Europa y se revela al mismo tiempo un diálogo del propio profeta cuatrotero en que habla de un beneficio de miles de millones de pesos, el “convencimiento” por la fuerza a los detractores y que los muertos por la pandemia “no me preocupa mucho”.
“Estamos hablando de miles de millones de pesos”, subraya en su diálogo mientras que de la misma fuente surgen las versiones de que al menos 20 munícipes, señaladamente el moreno de Ecatepec, Fernando Vilchis, se les liga con latrocinios y lavado de dinero. Los más de 500 mil muertos por la pandemia, no cuentan, no le importan, no votan.
O sea que la cobija de impunidad del caudillo es tan flexible que se puede extender a todos los corruptos que se dobleguen ante el César de Macuspana a quien sólo 40 senadores se atrevieron a decirle que no y seguramente algunos de ellos serán perseguidos ya sea por exhibición de las mañaneras o el inicio de alguna carpeta de investigación. Priistas y perredistas, doblaron las manos, hasta Ana Lilia Herrera Anzaldo.
Muchas pruebas de corrupción saldrán que salpicarán de lodo al ganso de Tepetitán y echarán por tierra aquello de “no mentir, no robar”. Salen las auténticas uñas del tlatoani quien, exhibido con crudeza, se reirá, reconocerá con cinismo los hechos, los matizará: “nosotros no espiamos”, realizamos tarea de inteligencia. Pedirá pruebas de lo que se acusa a su gobierno y se las restregarán en las mañaneras.
No aceptará nada en público, aunque en privado lo comente y eso salga a la luz; la mentira se le volvió adicción, así como lo son las drogas.
Mientras tanto, la confianza en el gobierno se cae a pedazos; la violación a la ley se contagia a gobiernos estatales y municipales, es la instrucción para conservar el poder “mantener el tronco” como dice el caudillo es para proteger la mayoría y disponer del dinero público para conservar el poder.
Lo que los de “antes” trataban de ocultar, en la 4T se volvió valemadrismo, que se sepa al fin y al cabo son dueños del Congreso federal y la mayoría de los estatales, la Suprema “corta” de Justicia; la amenaza y chantaje se volvieron la estrategia visible para obtener lo que quieren.
Y ojo porque eso se puede poner peor cuando vean que el PACIC no servirá para contener la inflación y el prócer de Macuspana se ponga sus moños respecto al tema energía del T-MEC, pacto al cual agrede con eso de bateo libre a las importaciones alimentarias, especialmente de granos, incluso sin certificación fitosanitaria.
Desatará en lo interno una competencia desleal, abandona a los campesinos productores y enfrenta a sus “comercializadores” frente a todos los demás, incluyendo los pequeños que se aglutinan en centrales de abasto y que están llamando a la quiebra frente a las cadenas de autoservicio, las cuales impondrán como siempre, pero ahora con el apoyo del caudillo, su reglas a los productores nacionales, con la amenaza de que si no les entregan cosechas a los precios que digan, se irán a la importación libre de impuestos y reglas sanitarias.
O sea, una vez más el profeta echa a pelar a los mexicanos, empresarios comercializadores y deja en el desamparo a los productores nacionales, especialmente temporaleros que aportan casi el 70 por ciento de lo que nos comemos a nivel nacional. Eso tampoco le importa al oráculo de Palacio Nacional, por el contrario, es la confrontación su mejor caldo de cultivo para la 4T.
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