Desde que hace unos años se destaparan los abusos sexuales cometidos por la Iglesia Católica a lo largo de su historia, las denuncias han seguido saliendo a la luz y la controversia se ha ido incrementado, porque el mundo ya no está dispuesto a callar y voltear hacia otro lado, por lo que las exigencias de justicia se hacen más presentes cada vez, porque para nadie es suficiente la disculpa dada en el 2010 el entonces papa Benedicto XVI, y es por eso que incluso diversos gobiernos se han dado a la tarea de investigar más a fondo el tema para poder darle justicia a las víctimas, tal como sucede en Portugal, en donde incluso el gobierno creó en el 2021, la Conferencia Episcopal Portuguesa (CEP), confirmada por seis expertos, entre un psicólogo infantil, psiquiatras, un ex ministro de justicia y hasta un cineasta, que buscan dar con la verdad sin importar que tan alto tengan que escalar en la jerarquía de la Iglesia Católica.
Como primer paso la comisión exigió se le brindará atención psicológica a las víctimas, porque en los últimos 70 años, nadie se preocupó por ellos, como si su sufrimiento no existiera, por lo que la ayuda nunca llegó y mucho menos se les dio voz a aquellos escasos casos en los que las victimas decidieron denunciar.
Pero hoy todo es diferente, porque no solo se está escuchando por primera vez a quienes habían levantado la voz, sino también se está buscando a aquellos que decidieron permanecer en silencio, es por eso que la investigación se hizo más exhaustiva en los últimos tiempos porque se quería conocer todos los casos que existieran de los crímenes cometidos por miembros de la Iglesia, y finalmente en días pasados, la comisión determinó un número aproximado de víctimas de estos abusos, la cual ronda los 4,800, aunque desafortunadamente, actualmente solamente están completamente validados 512 testimonios, por lo que todavía hay mucho trabajo por hacer.
Pero quizás, una de las cosas que ha levantado más polémica es el hecho de que de los casos ya registrados, solamente se han podido enviar a la justicia 25 casos, ya que el resto han prescrito, por lo que la sociedad le ha exigido al gobierno modificaciones en la ley que permitan, sin importar el tiempo que ha pasado, llevar ante la justicia a los inculpados, muchos de los cuales hoy siguen estando activos dentro de la Iglesia, como si nada
sucediera, por lo que al parecer ésta no se ha dado cuenta que su actitud de callar y cubrir, podría ocasionar su debacle en un país que ya no está dispuesto a
permitir más crímenes ni injusticias, porque han comprendido que lo hecho a unos perjudica a toda una nación, ya que como dijo Montesquieu; “Una injusticia hecha al individuo, es una amenaza hecha a toda la sociedad”.
JESSICA WOOLRICH