Yo Campesino / Pesadilla
• Cae la noche del ganso y nos arrastra a la peor crisis económica, seguridad y salud
*Miguel A. Rocha Valencia*
Como se esperaba el discurso y posiciones del ganso se endurecen, su belicosidad es cada vez mayor mientras el país sufre las consecuencias en seguridad, pobreza, salud y cancelación de oportunidades mientras la división provocada desde Palacio Nacional crece lo mismo que el crimen, drogadicción y muertos.
Los dos recientes años reflejaron una mortandad superior a las 800 mil víctimas fatales mientras que México se convirtió en país de pobres, con tres billones más de deuda, inflación que no cede y crecimiento promedio anual cercano al cero por ciento.
Ante tal fracaso, se explica que la agenda pública marcada desde el púlpito de la 4T sea el escándalo, la violación a la ley, cinismo, mentira y desde luego una doble moral donde la corrupción es patente de los de “antes”, pero propiedad de quienes hoy integran la mafia, la oligarquía en el poder.
Frente a las cifras negativas donde se integran el casi un billón de pesos en las “obras presidenciales” y un billón de pesos más que acumula Pemex en deuda más pérdidas que rebasan los 400 mil millones y le rodea corrupción que involucra compra de pipas “propiedad” del Ejército, contratos ocultos que favorecen a familiares y compadres presidenciales, el recurso es el desvío de la atención a otros actores o villanos como Felipe Calderón o Genaro García Luna a quienes se culpa de la matazón que casi llega a 149 mil asesinatos, pero no dice que se hace para contener la actual violencia criminal.
Y como no hay resultados con un aeropuerto que ni siquiera saca para “el gasto”, una refinería que no refina pero que ya rebasa los 18 mil millones de dólares (más lo que le falta) y un tren que pagado con nuestros impuestos será “propiedad” de los militares, se declara la guerra verbal, el infundio y la mentira contra quienes sacan la verdad del país a flote lo mismo que la corrupción cínica que impera en torno al ganso y que él mismo alienta y protege.
Pero cuidado, la pobreza aun no toca fondo, se profundizará igual que los miserables laborales quienes a pesar de tener empleo fijo y “aumentotes” salariales, no alcanzarán a comprar la canasta básica ni ser “aspiracionistas”.
Esto es básico en el proyecto cuatrotero, no se trata de sacar de ahí a los mexicanos que la sufren y se suman al ejército de pobreza, sino por el contrario, hacerlos más para convertirlos en clientes agradecidos del mesías tropical incapaz de generar riqueza, pero sí muy bueno para crear mendicidad institucional, de eso se alimenta. Hoy el 52 por ciento de la población económicamente activa, se encuentra en la miseria, en tanto que tres millones se volvieron ex clases medias y bajaron de nivel.
Y como no hay cimiento en la actividad económica porque no hay inversión privada suficiente y la pública disminuye por destinar más presupuesto a la compra de votos, la deuda crece lo mismo que la carestía.
La improductividad laboral cayó por segundo año consecutivo, acumula una baja bianual superior al ocho por ciento (Inegi) mientras la agrícola se refleja en un aumento de las importaciones en tonelaje y dólares incluyendo insumos como fertilizantes, especialmente los derivados de la petroquímica.
Por eso la carestía. Ningún pacto va a funcionar si no producimos lo que comemos y usamos y debemos recurrir a importaciones. De ahí que el dinero seguirá encareciéndose con aumento de 25 puntos base (estamos en 11 por ciento) como argumento real para contener inflación, mientras que el descuento de IEPS a los combustibles, acumulará por segundo año, cerca de 350 mil millones de pesos al déficit presupuestal.
A la chachalaca tabasqueña no le importa que con la estridencia de sus graznidos confronte a los mexicanos, haga señalamientos que puedan resultar en actos criminales como ocurre con la persecución mediática al INE, a la Suprema Corte de Justicia, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, periodistas, empresarios, la Universidad Nacional Autónoma de México y hasta a mexicanos de a pie sólo por ser “aspiracionistas”.
El chiste es desviar la atención, generar incluso un ambiente de violencia que nos haga ver en las fuerzas armadas una solución mentirosa y sí, muy peligrosa pues no debemos olvidar que los soldados ya están en las calles, tienen mucho poder y dinero, están organizados y un comandante supremo que como ya dijo quiere ser dueño de México, sus instituciones, bienes y habitantes. Cuidado.
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