Por Claudio De la Llata
Luego de la estrepitosa caída en la que ha sucumbido la 4T, vemos que desde el inicio había planes aviesos de pervertir la democracia, y la falta de pericia de la administración federal, dio al traste de que todos se dieron cuenta de las negras intenciones provenientes de Palacio Nacional, tratando desde un primer punto, de cambiar la constitución a base de discusiones vehementes, para fracasar, y pasar al plan “b” que ha fracasado igualmente, pues si bien es cierto, la constitución marca en el artículo 41 que todo asunto relacionado con lo electoral será sancionado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la resolución del los asuntos del INE, contenidos en el famoso plan “b”, es un asunto de lo contencioso administrativo, y tal vez la única variante, pudiera ser que no lo resolviera la primera sala donde están todos los ministros, sino la segunda sala, que es la especializada en lo administrativo y lo contencioso administrativo, por lo que es completamente válido que lo haya tratado la primera sala y haya otorgado medidas cautelares para tal fin.
Quisiera agregar además, que a este consultor jurídico de la presidencia; Alejandro Celorio Alcántara, quien esto escribe le ha dado seguimiento a todos sus litigios, demostrando en los hechos el referido, que es alguien incompetente, desconocedor de las facultades expresas del poder judicial, aunando el hecho de que, el más pícaro comentario, medianamente a su favor que he escuchado de los abogados que le conocen, es que litiga como quien asalta un tren.
Igualmente hay que referir, que los alegatos presentados a la autoridad judicial, y su contenido letrístico, en donde se inconforma por las medidas cautelares, contenidas en la suspensión de marras, dan cuenta de que goza de una ignorancia supina en temas legales, de cualquier género, por lo que, si tuviera que contratarlo, me negaría rotundamente, pues ese señor no gana un juicio de paz…
Además de lo ya dicho, la ruta y estrategia que toma la presidencia de la república, es del todo burda y obvia, además de que sólo son dos consejeros los que se van a relevar, y aunque una de las más vehementes de las aspirantes a ocupar el cargo, quedara de presidenta, con sólo su voto no bastará para derrotar al resto de la asamblea del consejo general del INE, por lo que las posibilidades del ejecutivo federal de mangonear a su antojo al INE, y de hacer las payasadas que quiere hacer con sus leyes torcidas, no sucederá, puesto que hay una asamblea y hay un pueblo que vigila cada vez más a los miembros de la 4T.
La licenciada Bertha María Alcalde Luján, es sin duda un ejemplo de la ignominia, pues toda su familia está en la nómina en alguna parte, y su desfachatez ha sido un motivo de señalamientos muy duros, y además ha sido vetada y sólo se espera que lo lleven a efecto. Por otro lado Andrés Manuel López Obrador, dijo en su mañanera (asunto que lo compromete legalmente), que nada de malo tiene que tengan las aspirantes preferencia por un partido, y que cualquiera podría llegar a ser presidenta del consejo General del INE.
Lo anterior, si lo cacha la oposición en el aire, genera el espacio y la posibilidad de levantar cargos en contra del presidente, pues la norma es clara y todos los consejeros son ciudadanos mexicanos y por tanto tienen derechos, pero uno de los requisitos es que sean apartidistas, y si hay dudas de su probidad, imagínense que puede pasar cuando el presidente de México, le puedan señalar jurídicamente, de resistirse a cumplir una norma, asunto que igualmente no es discutible.
Finalmente basta decir que esto apenas comienza, y causa mucho miedo, pues el camino de la confrontación pudiera propiciar una reyerta, que dejaría huellas y cicatrices en la sociedad, pues alguien tiene que impedir, que los intereses personales de la clase gobernante, no sean causa y motivo, para aplaudir un intento fallido de implantar una dictadura de persona o de partido, que será la mejor promoción a la violencia y los mexicanos, se llenarán de repudio, así como la reprobación de la comunidad internacional, pues ver nacer a una dictadura, es algo a lo que nadie ha estado dispuesto a ver, ya que una dictadura todos saben cuando empieza, pero nadie sabe cuándo terminará…