Francisco Gómez Maza
• Los economistas del Banxico esperan que, hacia finales de ese año, el aumento de precios se estabilice en un 3%
• Aunque el balance de riesgos del comportamiento de los índices de precios al consumidor se mantiene al alza
No termina todo aún con el problema de la inflación y su impacto en el costo del dinero para financiar la producción de bienes y servicios, así como los nocivos efectos que tiene en la capacidad de compra de los consumidores, especialmente de los más vulnerables.
Los pronósticos de las autoridades monetarias, para las inflaciones general y subyacente, se ajustaron marginalmente, y mantienen una trayectoria estable.
Siguen anticipando que la inflación converja a la meta del 3%, en el cuarto trimestre de 2024, cuando se haya iniciado un nuevo gobierno sexenal.
Ante ese panorama, como lo supusimos en la entrega de este jueves, el Banco central subió la tasa de interés interbancaria a un día en 25 puntos base para quedar en 11.25% anual, un nivel aún muy alto para financiar los procesos productivos.
Nuevos movimientos del costo del dinero continuarán pendientes del comportamiento de los precios de la economía. Si la inflación no cede, seguramente la autoridad monetaria se verá obligada a continuar con el alza de las tasas de interés y el enfriamiento de los procesos productivos.
En tanto, las previsiones del comportamiento de la inflación están sujetas a riesgos, tanto al alza como a la baja.
Los riesgos al alza, estimados por el Banco de México, serían:
i) persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados;
ii) depreciación cambiaria ante eventos de volatilidad financiera internacional;
iii) mayores presiones de costos; y
iv) presiones en los precios de energéticos o agropecuarios.
Los riesgos a la baja son:
i) una desaceleración de la economía global mayor a la anticipada;
ii) un menor traspaso de algunas presiones de costos;
iii) una disminución en la intensidad del conflicto geopolítico o un
iv) mejor funcionamiento de las cadenas de suministro; y
v) un efecto mayor al previsto de las medidas del Gobierno Federal
vi) ante la carestía.
Los banqueros centrales consideran que el balance de riesgos, respecto de la trayectoria prevista para la inflación, en el horizonte de pronóstico, se mantiene sesgado al alza. En base a esta percepción, la Junta de Gobierno del Banxico evaluó la magnitud y diversidad de los choques inflacionarios y sus determinantes, así como la evolución de las expectativas de mediano y largo plazos, y el proceso de formación de precios.
Consideró el Banco los retos ante el apretamiento de las condiciones financieras globales, el entorno de incertidumbre, la persistencia de las presiones inflacionarias acumuladas y la posibilidad de mayores afectaciones a la inflación, así como la postura monetaria, que ya se ha alcanzado en este ciclo alcista.
Con base en lo anterior, y con la presencia de todos sus miembros, la Junta decidió, por unanimidad, incrementar en 25 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 11.25%. Con esta acción, se reduce el ritmo de incrementos y la postura de política monetaria se ajusta a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta de 3% dentro del horizonte de pronóstico.
La Junta de Gobierno del Banco Central informó que vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas. Ello, con el objetivo de determinar una tasa de referencia congruente en todo momento, tanto con la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3%, en el plazo en el que opera la política monetaria, como con un ajuste adecuado de la economía y de los mercados financieros.
Así, la Junta de Gobierno dijo que tomará su próxima decisión en función del panorama inflacionario, considerando la postura monetaria ya alcanzada.
Presume Ramírez de la O de finanzas públicas sanas
En el primer bimestre del año, los balances del Sector Público superaron lo previsto en el programa y se compararon favorablemente respecto a lo observado en el mismo periodo de 2022, lo que demuestra la solidez de las finanzas públicas, presumió el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la
O
De acuerdo con el informe de Finanzas y deuda públicas, a febrero de 2023, los ingresos públicos mantienen un buen desempeño, lo que refleja la fortaleza de la economía nacional.
La recaudación tributaria registró un crecimiento de 4.2% anual en términos reales, impulsada por el sólido desempeño de la demanda interna y los altos niveles de empleo, dijo la vocería de la dependencia encargada de la hacienda pública.
Dentro de los ingresos tributarios, destacó el crecimiento anual del ISR en 8.2% en términos reales, mientras que la recaudación del IEPS de gasolinas y diésel registró cifras positivas por cuarto mes consecutivo debido al retiro gradual de los estímulos a los combustibles en el contexto de la estabilización de los precios del petróleo.
En línea con el objetivo de elevar los niveles de crecimiento económico de mediano y largo plazos, la inversión física directa creció 16.3% anual a febrero. Asimismo, en busca de mejorar los indicadores sociales y económicos, un 69.5% del gasto programable total fue destinado a desarrollo social y un 23.1% a desarrollo económico.