Aquí en el Congreso
Por José Antonio Chávez
Los líderes del PRI, Alejandro Moreno “Alito” y del PAN, Marko Cortés, no encuentran como destrabar la necedad del gobernador de Yucatán, Mauricio Vila que nomás no quiere soltar ninguno de los cargos a elegir en las próximas elecciones del 2024.
No está nada contento poque le ganaron la candidatura al gobierno con el actual presidente municipal de la blanca Mérida, Renán Barrera.
Ahora quiere imponer la fórmula al Senado que hoy preside la morenista, Ana Lilia Rivera, y los candidatos a las presidencias municipales, además de las seis diputaciones federales.
Su cerrazón está generando severos problemas, pues uno d ellos compromisos de esa alianza es repartir equitativamente los cargos de elección popular y las mismas plurinominales.
Desde luego qué, si el gobernador Mauricio Vila se aferra a no soltar la fórmula del Senado para que pueda relegirse el actual, por el PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, dentro de esos acuerdos, tendría como consecuencias una ruptura en ese estado de la lianza opositora que es el frente Amplio por México.
La preocupación del Marko Cortés como líder nacional del PAN, es que si Vila no cede los priistas le voltearán bandera y puede apostar que perderán, no solo la gubernatura sino la fórmula al Senado y la mitad de las seis diputaciones federales, además de los municipios, pues el voto sería de castigo y el beneficiado sería Morena.
El plazo para Vila está en el aire y será este lunes cuando tendrá que definir si se adapta a los lineamientos del Frente o se quiere ir por la libre en una ofrenda al propio líder de su partido.
Dicen los que saben que el gobernador Mauricio Vila anda muy encabronado porque no lo dejaron pasar como candidato Presidencial. Naturalmente que en Yucatán es el rey, pero en el país ni siquiera lo conocen, por eso lo batearon.
Además, Vila sabe que, aunque lleva todo el respaldo del que manda en Palacio Nacional, no niega que hay un expediente con su pasado cuando facturó, como presidente municipal de Mérida, a empresas fantasmas y que sin duda se la están guardando.
El ofrecimiento del Frente es que al dejar la gubernatura asuma el Senado de la República, en representación de Yucatán, pero tampoco quiere ceder el espacio, en la fórmula por mayoría para su relección al priista Ramírez Marín que, basta recordar fue el único de los 13 de su partido que ganó por mayoría de votos.
Mauricio Vila no le gustó para nada la foto donde aparece Ramírez Marín, como único priista con la bancada de Morena y la Presidencial, Claudia Sheinbaum en la Cámara Alta, un mensaje velado que está, prácticamente con un pie en ese partido y con una candidatura más que segura.
Desde luego que esa estampa lleva la jiribilla urgente para que decida Vila si quiere estar con el Frente o quiere perder solo la batalla. Su decisión tiene un límite de tiempo.