La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
No son anarquistas, pero, como se parecen: cada quién trae sus propios datos
El proceso, para elegir a la virtual candidata presidencial de MORENA y aliados, tuvo dos aristas destacadas: ganó la favorita y, Adán Augusto López y Ricardo Monreal, resultaron ‘tigres de papel’, a pesar de tener proyección nacional, Noroña les comió el mandado.
Por lo tanto, la encuesta es un arma de doble filo, puede dar el triunfo o someter a los contendientes, a un ridículo atroz. Veamos el caso Veracruz y sus principales aspirantes.
Rocío Nahle, secretaria de Energía, se mueve en las altas esferas del poder (sus visitas a ‘la mañanera’ fueron frecuentes) y tiene el apoyo del gobernador Cuitláhuac García.
Eric Cisneros, secretario de Gobierno, disfruta la posibilidad de tejer acuerdos con todos los actores políticos de la entidad: empresarios, diputados, ediles, iglesias, etc.
Zenyazen Escobar, secretario de Educación, puesto que le permite construir consensos con los sindicatos más numerosos, además, su imagen ha sido expuesta en más de 20 mil planteles escolares.
Manuel Huerta, delegado de Bienestar por casi cinco años, tuvo el encargo de impulsar y nutrir los padrones de los programas sociales, por lo cual, visitó todo el territorio estatal, se puede afirmar que, junto con los Servidores de la Nación, operó casa por casa.
Sergio Gutiérrez, diputado federal, tiene dos años de frenética campaña y un envidiable despliegue mediático, se ha rodeado de ex priistas, ex panistas y hasta de ufólogos.
Queda claro, todos traen ‘sus propios datos’ y sí se anotaron, es porque perciben que pueden ganar o, al menos, posicionarse en un buen rango porcentual.
Sólo hay un lugar, sin embargo, los resultados mostrarán la popularidad real de los participantes y con base en ello, podrán negociar o, de plano, retirarse a sus habitaciones.