Día Hábil
A los aplaudidores de Andrés Manuel López Obrador y a él no les gustó que se filtrara el número telefónico de su hijo, José Ramón López Beltrán.
Tampoco a Claudia Sheinbaum Pardo, a Jesús Ramírez Cuevas, a Citllli Hernández, a Mario Delgado o a Gerardo Fernández Noroña, candidata presidencial de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), vocero y próximo diputado federal, así como al resto de coequiperos, que se conocieran los suyos.
De hecho, la ex jefa de gobierno de la CDMX se victimizó y acusó que le han enviado toda clase de insultos vía mensaje.
Pero, parafraseando al que cobra como titular del Ejecutivo, pues “no pasa nada, que cambien su teléfono”.
También se hizo público el número telefónico de Xóchitl Gávez Ruiz, la candidata a la Presidencia de la coalición Fuerza y Corazón por México, integrada por PRI, PAN y PRD, pero ella, más inteligente, aprovechó y de inmediato posteó un video en el que muestra el número, dice que no lo cambiará y hasta pide que le llamen, que le envíen mensajes, en lugar de quejarse.
Se nota que ya hay mentes brillantes en su equipo de campaña que pueden detonar, en cualquier momento, un punto a favor de la senadora con licencia.
López Obrador defendió así su decisión de revelar el teléfono celular personal de la corresponsal del diario al que llamó pasquín, The New York Times, Natalie Kitroeff, por haber publicado un reportaje sobre presunto financiamiento del narcotráfico a su campaña en 2006, al asegurar que tiene “autoridad moral” y que la libertad está por encima de las leyes de transparencia y protección de datos personales.
Perdido, enfermo de poder, de soberbia, de megalomanía, el tabasqueño se dijo superior a cualquier ley.
Sí, como ha dicho en otras ocasiones, que no le vengan con que la ley es la ley.
-Es un asunto en donde está de por medio la dignidad del presidente de México, y yo represento un país, represento a un pueblo que merece respeto, que no va a venir cualquiera porque nosotros no somos delincuentes, tenemos autoridad moral, no va a venir cualquier gente a acusarnos, dijo.
-No importa lo que diga la ley de protección de datos personales, pero un principio sublime es la libertad. Todo mundo tiene el derecho a defenderse de los cuestionamientos periodísticos que lo presenten así, ¿y mi derecho?, ¿Tiene derecho a calumniarme a mí, a mi familia, a mis hijos? Es muy ofensivo, mucho, muy ofensivo, dijo visiblemente enojado.
En un país en el que los periodistas son asesinados con una facilidad preocupante y en el que sólo el 1 por ciento de los delitos son esclarecidos y se llega a una sentencia, la actitud del señor al que le quedan sólo cinco meses en el cargo es absolutamente reprobable.
Desde 2000, Artículo 19 ha documentado 163 asesinatos de periodistas en México, en posible relación con su labor.
De estos, 43 en el lúgubre sexenio de López Obrador y 47 en el de Enrique Peña Nieto.
El gobierno de Javier Duarte de Ochoa, de diciembre de 2010 a noviembre de 2016 en Veracruz, ha sido el más letal para los periodistas: 18 asesinados, incluido el fotógrafo Rubén Espinosa.
Veracruz es el primer lugar en asesinatos de periodistas, con 31 y siete de ellos han sido en el (des)gobierno del mediocre Cuitláhuac García Jiménez.
SIEMBRAN MIGRANTES EN EL NYT
Ayer y tal como sucedió en la gira de Xóchitl hace un par de semanas por Estados Unidos, migrantes a sueldo de Morena fueron enviados a protestar en las afueras del pasquín -obvio es sarcasmo- dizque por mentir con el trabajo publicado por Kitroeff.
Protestas de enviados pagados al The New York Times, así como sucedió durante la gira de Xóchitl Gálvez Ruiz, la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, que
QUE INVESTIGARÁ POLICÍA CIBERNÉTICA
Gerardo Fernández Noroña, farsante socialista que gusta de los satisfactores del capitalismo, como los grandes ingresos, los viajes por el mundo, los autos de gran gama y la comida gourmet, amenaza con que la policía cibernética investigará la revelación de los números telefónicos personales de los políticos en cuestión.
El hoy tapete de Claudia Sheinbaum, perdón, vocero, dice que se violentó la privacidad y el manejo de datos personales… que comenzó su ídolo y protector, López Obrador.
Así de farsantes.
Vámonos: Faltan 122 días para el llamado Día Cero -cuando se acabe el agua del Sistema Cutzamala- y nomás no se ve que hagan algo Martí Batres, Delfina Gómez y la Conagua, donde cobra Germán Arturo Martínez Santoyo como presunto director.
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex