NO PASA…NADA
Por Jesús Solano Lira
Por fin hubo justicia para Sanjuana Maldonado Amaya. Ayer, salió libre, tras cumplir 15 años de prisión de una condena de 30 por secuestro agravado, delito que no cometió. Fue indultada por el Congreso de San Luis Potosí, por lo que se ordenó su libertad inmediata. La votación fue unánime y la sesión muy emotiva. Fue a través de una carta que Sanjuana entregó a la Asociación Civil Perteneces, quien la hizo llegar a los legisladores, como inicio el proceso para obtener su libertad.
En la misiva señaló que dependía del indulto, para para recuperar su derecho a la familia, a la libertad, a la vida y a la justicia. Durante el debate, la diputada Emma Idalia Saldaña Guerrero, resaltó las injusticias de que fue víctima Sanjuana durante su proceso penal. La legisladora sostuvo que “Sanjuana Maldonado (fue) víctima de múltiples formas de violencia de género, estructural, simbólica, de pareja y familiar, violencias (que) no sólo condicionaron su vida y decisiones, sino que fueron ignoradas completamente por quienes la juzgaron y la sentenciaron”.
La historia de Sanjuana, como la de infinidad de mujeres que se encuentran presas, es de rompe y rasga, por todo lo que tuvo que pasar: humillaciones, vejaciones y una justicia mal impartida. En mayo de 2009, fue engañada por su pareja, quien la violentaba física y psicológicamente, para retirar dinero de una cuenta suya, que era parte del pago de un rescate por un secuestro. Fue ahí donde empezó su calvario. Historia que después de tres lustros, tuvo un final feliz.
VULNERÓ
Qué siempre sí el presidente López Obrador, se metió hasta la cocina en el pasado proceso electoral, que fue una clara elección de Estado, aunque él diga lo contrario, y veremos este viernes que responde a la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que determinó que vulneró la imparcialidad y equidad e influyó en el resultado de la contienda. Ahí le va el chisme.
La Sala Superior del TEPJF concluyó que, durante la mañanera del 12 de abril, López Obrador, incurrió en diversas infracciones electorales, por destacar logros y acciones de su gobierno durante la veda electoral, además de manifestar su rechazo hacia la oposición, en pocas palabras, hizo uso indebido de recursos públicos y vulneró los principios de imparcialidad, neutralidad y equidad.
De acuerdo con la resolución, el presidente “identificó a su persona y al grupo o movimiento al que pertenece como responsables de los referidos logros, acciones y compromisos. Emitió manifestaciones de índole o carácter electoral con impacto en el proceso federal y los 32 locales que se encontraban en curso”. Quiúboles, así o más gandaya.
Y lástima Margarito, el presidente no puede ser sancionado, porque así lo señala la Constitución y criterios de la Sala Superior del TEPJF, y solo se declara su responsabilidad en los hechos, pero seguro para el inquilino de Palacio Nacional NO PASA…NADA.
TRANSPARENCIA
Comienza a dar frutos el programa de transparencia pública de Chimalhuacán, que en septiembre pasado fue reconocido por el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de México y Municipios (INFOEM) por el programa “Transformando la Educación con Igualdad”, el cual recibió estrellita, al cumplir al 100% los requisitos establecidos en los criterios de evaluación.
Ahora, la presidenta municipal de Chimalhuacán, Xóchitl Flores, sin miedo al éxito, llevará el programa de Transparencia Proactiva “Transformando la Educación con Igualdad” a ligas mayores, y participará con esa herramienta en el Certamen de Innovación de Transparencia 2024 propuesto por el INAI, y volverá a concursar en el Reconocimiento a Prácticas de Transparencia Proactiva 2024 del INFOEM.
Y para que no se quede con cara de qué es eso, le comparto que el programa “Transformando la Educación con Igualdad”, premiado el año pasado por el INFOEM, tiene el objetivo de apoyar a los estudiantes de nivel básico en la compra de útiles escolares, evita la deserción escolar y busca cerrar la brecha de desigualdad en el acceso a una educación de calidad.