Aquí en el Congreso
Por José Antonio Chávez
Le comenté la semana pasada que la designación de seguir en el cargo del IMSS de Zoé Robledo el gobierno de Claudia Sheinbaum fue por una propuesta del Presidente para que le pudiera concluir el programa de las clínicas IMSS-Bienestar en los próximos tres años.
También le comenté que fue porque ese proyecto, prioridad del Presidente, no se podía concluir en el corto tiempo que pedía, Zoé lo convenció que se necesitaban al menos tres años para consolidar como lo quería.
Sheinbaum sabe que Zoé podría dejar el IMSS en las elecciones intermedias del 2027 para pasar a la Cámara de Diputados y de ahí prepararse a la gubernatura de Chiapas, o incluso concluir en la institución al 2030 para dejar muy cimentado ese proyecto de López Obrador de sanar y transparentarlo.
Zoé en su explicación ofreció que se requiere al menos tres años para madurar el programa de IMSS-Bienestar, para nadie es secreto es que ese proyecto está, contemplado, de forma paralela un modelo con el Instituto de alcanzar al máximo la calidad de servicio.
Ayer Sheinbaum, para reforzar ese modelo o, para meter cuña a Zoé, designó a Alejandro Svarch al frente de IMSS-Bienestar.
La próxima Presidenta de México quiere llevar ese modelo, entre otras funciones, atender a los pacientes en sus hogares, una auténtica copia del programa que ellos cuando eran perredistas impulsaron en la jefatura de gobierno con el doctor Miguel Angel Mancera, hoy, ambos enemigos públicos.
El programa de Médico en tu casa, fue un éxito, fue d ellos mejores programas sociales que ha marcado el país, a pesar de haber sido solo en la CDMX y que sirvió para que en otros estados se replicara.
Atendían, de entrada, a los pacientes o enfermos que no podían trasladarse a las clínicas u hospitales. Ahí en su cama, los atendían los doctores encomendados en esa tarea, sin importar el domicilio que tan lejos o que intransitable para llegar. Simplemente se cumplía.
Algunos gobernadores de corte panista y priista solicitaron el permiso a Mancera para replicar ese modelo, necesitaban su ok para ponerlo en marcha y parece que hoy sigue vigente.
También Sheinbaum pretende el modelo, con el IMSS-Bienestar, suplir el Seguro Popular que impulsaron los panistas de Marko Cortés en el sexenio de Vicente Fox y seguido por Felipe Calderón, incluso con el PRI de Peña Nieto.
En 2018, López Obrador decidió eliminarlo, pero no logró sustituirlo con ningún mecanismo, a pesar que promovía al famoso INSABI que nunca pudo despegar. El Seguro Popular inició en 2003, mitad del sexenio de Fox y alcanzó con Calderón los diez millones de afiliados.
Ahora vamos a ver que as se trae el director general del IMSS, Zoé Robledo que tendrá que ceder esa función de dirección al nuevo miembro del gabinete de Sheinbaum.
Desde luego que se necesitará de un Presupuesto mayor que estaría definiendo la Cámara de Diputados que preside hoy la priista, Marcela Guerra con el aval de la Cámara Alta que lidera la presidenta morenista, Ana Lilia Rivera.
Le adelantó que no crea que Morena y sus aliados tendrán problemas para aprobar el Presupuesto del 2025, pues los próximos líderes del Senado, Adán Augusto López y en San Lázaro, Ricardo Monreal ya lo tienen más que contemplado. El 15 de diciembre sin duda cerrarán el primer periodo de sesiones sin mayores complicaciones.
Jachavez77@yahoo.com