Yo Campesino / Mafiosos
• Hay pruebas de nexos del ganso con el crimen organizado. 4T como pandilleros
Miguel A. Rocha Valencia
Más allá de que lo dicho por Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México sea cierto en torno a la existencia de pruebas de ligas del ganso con el crimen organizado y son conocidas en Estados Unidos, hay evidencia pública de esa ligazón que ha permitido el empoderamiento de la delincuencia en casi todo el país a través de sus redes de narco tráfico, secuestro y venta de personas, pero sobre todo la extorsión que se convirtió en la segunda fuente de ingresos de los hampones.
Porque hoy, gracias a la permisividad con que actúa el gobierno comandado por el ganso y que habrá de continuar la corcholata, los delincuentes pueden hacer lo que quieran, hasta atacar a militares y la Guardia Nacional hasta asesinarlos, someter comunidades, aterrorizar ciudades enteras, tomar carreteras, asaltar impunemente y apoderarse de actividades productivas y comerciales donde se les de la gana.
Tan es así que el comandante de la tercera zona militar con base en Sinaloa Francisco Jesús Leana Ojeda lo reconoció mientras los muertos, más de 30, se siguen acumulando aunque el profeta lo justifique diciendo que hay más ejecuciones en Guanajuato.
La 4T que incluye a su profeta, lacayos legisladores y gobernadores, se convirtieron en un cártel donde como en toda mafia que se respete, no existen testigos porque todos con cómplices, así se comportas y lo mismo extorsionan que secuestran como ocurrió recientemente con los Yunes y otros muchos políticos sometidos bajo la amenaza de persecución a través de fiscalías, las UIF o el SAT.
Por eso hoy que García Luna se atreve y señala que si su condena se base en dichos de criminales detenidos en su tiempos como funcionario, fue por pedido del gobierno mexicano que también aportó “pruebas falsas” que ya fueron desmentidas.
Pero si de eso se trata, con los mismos testimonios que le pueden costar una sentencia de cadena perpetua, se podría acusar al cadillo de la 4T y a muchos de sus cómplices a varios de los cuáles se les han imputado ligas con la delincuencia organizada a grado tal que utilizan los mismos métodos de los criminales comunes como la extorsión, la amenaza directa y soslayada utilizando todos los instrumentos y recursos del gobierno incluyendo la difamación, el descrédito público.
Porque el mesías tropical cobra derecho de piso y a quien no paga con sumisión, se le deja de invitar a palacio Nacional, se le borra de las “listas” de empresarios, políticos o comunicadores beneficiados, se ordena y se amenaza a quien no paga o como en el caso el poder Judicial se le quita el piso, se le inventan defectos, corruptelas que en otro tiempo eran conquistas laborales y se les condena al ostracismo, a la extinción porque así lo quiere el pueblo encarnado por el machuchón.
De ahí que lo dicho por García Luna cobre relevancia en especial cuando apunta que: en los archivos de los gobiernos de México y Estados Unidos pruebas de los contactos, videos, audios, fotografías, registro de comunicación y gestión entre el tlatoani macuspanense y sus cercanos con el narcotráfico. Eso sin olvidar que el hijo de Ismael “El Mayo” Zambada, hizo imputaciones directas.
Tampoco se debe olvidar que de acuerdo a las declaraciones de Reynaldo Zambada, la relación viene desde antes de que el inquilino de palacio Nacional fuera jefe de Gobierno de la CDMX y que incluso de acuerdo con versiones de “potros” del escuadrón de Motociclistas, existían grupos para custodiar drogas, dinero o criminales su paso por la capital del país, “generalmente del aeropuerto Internacional a Polanco”.
Pero ademán a nadie o al menos a mi no me cabe duda de que los departamentos de Estado y del Tesoro, así como en el Congreso de Estados Unidos, le llevan su cuentecita al ganso al que seguramente su corcholata le va a colocar una escolta nunca antes vista si se va a La Chingada , porque los cuidados del pueblo sabio y agradecido no le van a darla tranquilidad para “descansar” y operar desde su “humilde” finca, sobre cuya adquisición también nos mintió.
Por cierto, nada se dice sobre las propiedades de sus trabajadores hijos, hermanos y demás familiares.