La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Con Claudia candidata andaban como ‘la Lecherita’, con Sheinbaum presidenta como ‘la Zarzamora’
Además del propio Cuitláhuac García, que sigue sin ligar ‘hueso’ (seguramente lo tendrá, pero, algo muy inferior a lo que soñó), el todavía presidente de la JUCOPO del Congreso local, Juan Javier Gómez Cazarín, no ha conseguido colocarse en ningún cargo, por más que sus vocingleros se esfuerzan en propalar falacias.
Que sí será un poderoso interlocutor de Sheinbaum con la próxima gobernadora Rocío Nahle, que sí manejará los padrones de los programas sociales como delegado de Bienestar, que sí comenzará a construir su postulación a la gubernatura en 2030, en fin, una serie de versiones maquinadas en una noche de sueños guajiros que, por ende, no se concretan.
Sin embargo, sí el improvisado diputado hiciera una correcta lectura de las columnas políticas, podría constatar que, de un tiempo a la fecha, connotados periodistas le auguran un futuro poco halagüeño.
En efecto, las filtraciones sobre lo que le espera a Gómez y sus contlapaches, tiene que ver con la especie de que las arcas del Congreso serán auditadas a conciencia, circunstancia que, de acuerdo a los enterados, dejaría al susodicho muy mal parado.
Por otra parte, se han revelado supuestos ‘negocios’ que interesan la ‘venta’ de candidaturas y cargos en el Poder Judicial, incluso, el informado columnista, Pepe Ortiz, menciona la existencia de comprometedores audios.
Las señales periodísticas son claras, desde luego, la ansiedad hace difícil entenderlas.