homopolíticus
* Revive Luisa María al Muerto
Al diputado del PAN Daniel Martínez, no le importa que la procuración de Justicia de Morelos —él nació en Chihuahua y su abuelo Luis [1829-1923] fue un ladrón de terrenos y asesino de apaches— sea último lugar nacional, sino que el zar anticrimen se quede sentado hasta 2027, «por ley».
Pero la voz de Martínez tiene el pensamiento de la reincidente diputada del PT, Tania Valentina Rodríguez —«La morena con valor»—, como podría ser también en el caso de la diputada de MORENA, Jazmín Solano, presidenta de la Mesa Directiva, infiltrada por Rodríguez hasta en sus declaraciones sin independencia intelectual.
Extrañamente —parece que se debía decidir en nombre de la congruencia si ya se definió políticamente y hacia qué lado—, ha dicho Solano no reunir los votos necesarios para remover al zar anticrimen que se negó a ser Uriel Carmona —la dependencia sólo levanta cuerpos y administra políticamente la procuración de justicia—.
La estructura de los discursos de la diputada de origen morenista, tiene un contenido que grita en silencio que está siendo parte de la bancada graquista que respaldó no con gratuidad a Carmona durante la anterior legislatura, la 55. ¿Por qué Jazmín Juana no declara del dinero para la frustrada adquisición de un helicóptero, que no se sabe dónde está? ¿Y los pendientes de pago a extrabajadores, ya no lo son?
No haber fecha, como declara, para que explique el fiscal ante el pleno cameral y en sesión pública el porqué del fracaso en persecución del delito de homicidio doloso, impune en alrededor de 90 por ciento desde 2017 y aun teniendo un presupuesto envidiable por extraordinario para otros estados más grandes y con mejores notas de resultados, huele a subordinación.
La propia Tania Valentina, más los reincidentes Andrea Guadalupe Gordillo, Luz Dary Quevedo, Pancho Sánchez y Beto Sánchez —a quien apretaron judicialmente por una retroexcavadora robada que encontraron en un predio familiar—, continúan respaldando al fiscal, como lo hacen Martínez y Gerardo Abarca, del PAN, y Gonzala Eleonor Martínez, del PRI, todos del G8 opositor.
Para remover a Carmona, se necesita el 75 por ciento del total de diputados, es decir, 14 de 20. Pero ayer la gobernadora Margarita González-Saravia dictó un telegrama urgente con destino a un domicilio conocido, al recordar en Yecapixtla que Uriel Carmona tiene pendientes y vigentes, denuncias de carácter federal. O tal discurso margarista fue un mensaje político rutinario y coyuntural, o fue un criptograma fácil de descifrar: el Claudismo va por Uriel.
letraschiquitas
Sin cálculo político, la de facto número 2 de MORENA en el país, Luisa María Alcalde, padeció los efectos de su crítica al poder Judicial que, según su errónea lógica, obstaculizó el suministro de vacunas contra el SARS-coV-2, cuando fue el gobierno de la República al que perteneció, quien dejó sin inmunizar y durante el pico más alto de la pandemia, a millones de mexicanos***. Aún con delincuentes entre los caídos, el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, debió decir eso, la verdad: que entre las mujeres y hombres que fueron asesinados siendo inocentes, había dos criminales, pero avaló lo dicho por su alcalde, Felipe Fernando Macías, que etiquetó a todos como delincuentes y que, por consiguiente, merecían morir***. Las asambleas que ordenó Andrés Manuel López Beltrán [AMLOB] en estados a senadores y distritos a diputados federales, sólo sirvieron de marco para que Alfonso Ramírez saliera a visibilizar la división que avanza entre morenistas, cuatroteístas, obradoristas y claudistas, es decir, con tribus de poder por el poder.