Aquí en el Congreso
Por José Antonio Chávez
Movimiento Ciudadano propiedad de Dante Delgado, el pasado sábado con su voto a favor de la reforma al Infonavit que impulsó el partido oficial, dejó más que claro su adhesión a Morena.
Por más que el recién nombrado líder nacional del partido naranja, Jorge Alvarez Máynez, intente querer convencer que son la alternativa opositora, cada día que se acerca las elecciones de Veracruz y Durango, huele más a AMLO.
Ese acercamiento para apoyar al partido de la 4T, fue lo que irritó al entonces gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro quien pugnaba por adherirse con el PRI de Alejandro Moreno “Alito” y el PAN, ahora Jorge Romero.
Urgía que era necesario agruparse para enfrentar a Morena, pues había todas las condiciones para que el partido oficial hiciera una campaña de estado y no se equivocó.
Alfaro mantiene un capital político superior al millón 200 mil integrantes, cifra que significas el 40 por ciento del musculo total de Movimiento Ciudadano que superan los 2.8 millones de militantes y simpatizantes, vaya el voto duro.
Su ruptura se registró a raíz de la imposición de Alvarez Máynez como candidato Presidencial, influyó, obviamente el gobernador de Nuevo León, Samuel García y en consecuencia Dante Delgado obedeció.
Alfaro, a partir de ahí marcó su raya y adelantó que, en Jalisco, entidad que gobernaba, el voto de Movimiento Ciudadano sería para sus candidatos locales y en lo federal votaría por la opositora Xóchitl Gálvez. Después de las elecciones, vino la designación como líder del partido, Máynez se coronó.
Dicen los que saben que el líder de los morenos en San Lázaro, Ricardo Monreal había pedido el voto naranja para que Morena no se viera muy gandalla, pues para nadie es secreto que no necesita de la oposición ni de MC para aprobar cuantas reformas se le pongan enfrente. El presidente de la Mesa Directiva de los Diputados, Sergio Gutiérrez celebraba esa adhesión y hasta la aplaudía.
VOTO A REFORMA PJ, PRIMER INDICIO DE MC DE VESTIRSE DE MORENA
Cuando comenzó el periodo de sesiones, Morena necesitaba un voto para lograr la mayoría calificada de 85 votos en el Senado de la república y poder aprobar lo que les viniera en gana.
Estaba en juego la reforma al Poder Judicial que el todavía Presidente López Obrador soñaba con aprobar antes de terminar su sexenio el 1 de octubre. Por ser reforma constitucional necesitaba de los dos tercios de Cámara d Diputados y del Senado. En la primera le sobraban votos, en la segunda necesitaba de uno.
El líder de la bancada de Morena en el Senado, Adán Augusto echó a andar la maquinaría del gobierno para presionar a senadores del PAN, PRI y MC. Necesitaba un senador.
Fue el panista veracruzano, Miguel Angel Yunes la sorpresa de adherirse, ese día a la bancada de los morenos. Al mismo tiempo, el senador de Movimiento Ciudadano, Daniel Barreda hacía lo propio al esconderse para evitar llegar a las votaciones. Se desapareció y argumento auxiliar a su padre que estaba detenido en Campeche.
Don Adán traía la presión muy alta de Palacio Nacional para lograr sacar es reforma, por eso lo que pedía el gobierno de AMLO se lo concedía, querían asegurar los votos de 85 de los 128. La oposición mantenía 43 y frenaba esa reforma.
Adán Augusto, tejió fino para convencer, por las buenas o por las malas a Yunes y Barreda para que aportaran el voto a su favor, el panista de forma presencial y, el de MC que se ausentara para asegurar, si de última hora de rajaba el del blanquiazul.
Daniel Barreda está muy quitado de la pena en su bancada y sus compañeros, Clemente Castañeda, Alejandra Barrales, Amalia García y el propio Luis Donadlo Colosio parecen más que compañeros, sus alcahuetes y cómplices de ese armado disfrazado para apoyar a Morena.
PARECE QUE LA OPOSICIÓN CAYÓ EN UN SOLO PARTIDO, EL PRI
Y ahora que votaron a favor de la reforma al Infonavit, con Morena y aliados, pues simplemente, si había dudas, quedó más que claro que no son más que un satélite naranja del oficialismo.
Hoy parece que, por la tibieza del PAN en espera que cambie con la llegada de Ricardo Anaya, la oposición se disminuyó a un partido: el PRI de Alito, un personaje político que ha sido presionado severamente para declinar sus votos a favor de los morenos, su negativa y postura firme, le está costando un severo pataleo hasta de sus ex compañeros lideres del partido que se han vendido por unas monedas para pedir, públicamente su cabeza, pero parece que les salió más diablo que el propio diablo y no lo doblaron.
Jachavez77@yahoo.com