Yo Campesino / Patrioteros
- Gobernadores de Sinaloa y Guerrero se suman a la defensa de ¿Quién?
Miguel A. Rocha Valencia
No nos arrodillamos ante nadie, defenderemos la soberanía y más frases por el estilo son las que marcan tendencia de simpatías populares y claro, la lana bimestral que llega puntual y se agradece con votos, pero en el fondo ¿De quién o a qué defendemos?
Las declaraciones de Donald Trump, sus amenazas, vienen como “anillo al dedo” a la 4T, al oficialismo justo cuando se necesita un recurso patriotero para acallar los gritos de “narcogobierno” y de la crisis económica que golpea las puertas del país o de los escándalos de corrupción que convierten a la 4T en un auténtico cartel donde tienen cabido desde delincuentes comunes hasta infractores electorales, actores políticos chaqueteros, traidores acomodaticios y todo lo que se pueda llevar a las filas agradecidas aunque sean despojos para el basurero de la historia o de algún reclusorio.
La discursiva oficial de palacio y de cualquier evento nos llega a un frente común donde el malvado de la historia será el presidente de Estados Unidos convertido hoy en el villano favorito de la opinión pública, atizada desde el zócalo de la Ciudad de México para olvidar temas que son de fondo y que nos tienen en crisis, incluyendo alimentaria, porque si en uno de esos desplantes nos toman la palabra del otro lado de la frontera y nos cierran o encarecen el maíz, aunque sea transgénico, nos van a partir.
Por eso y aunque solo sea una estrategia distractiva del güero estadunidense y sus amagos, hay que medir los llamados patrioteros y cuasi nacionalistas que en vez de abonar a una buena relación binacional, nos llevan a la confrontación desigual por más que nos tomen de “a lucas” y se entienda allá, que las arengas palaciegas responden a eso, a distraer la atención de lo que pasa en el país.
Eso sin olvidar que si hay alguien responsable de la falta de dinero, endeudamiento, bajo crecimiento, la caída de la inversión privada, especialmente extranjera y los fenómenos migratorios, no son los gringos sino nosotros mismos incapaces de generar crecimiento y desarrollo, pero buenos para endeudarnos, regalar dinero y echarle la culpa a los demás de la falta de eficiencia y eficacia de un gobierno enfocado más a consolidar su permanencia que a superar problemas del país.
Van para siete años en el poder y aun culpan al pasado de lo que son incapaces; critican a los de antes por crecimientos “pírricos” del dos por ciento, pero no han podido llevarnos ni siquiera al uno por ciento. Acusan a los “otros” de corruptos pero se enriquecen de manera escandalosa sin que se acepten culpas de los de casa a quienes se protege, lo mismo que a delincuentes del pasado que se suman a sus filas y juran lealtad aunque todos sepamos que quienes traicionan una vez, siempre lo harán.
Corrupción e impunidad es el sello en complicidades dentro de un partido o movimiento que perdona pecados a cambio de votos y se transforma en cartel criminal donde privan los abrazos no sólo a los delincuentes comunes y organizados sino a los de cuello blanco que “antes” fueron escarnecidos, amenazados con cárcel y hasta inmolado en la hoguera de la verborrea presidencial.
Sujetos con pecados capitales que robaron miles de millones de pesos dejando estelas de abusos de poder, violaciones, complicidades criminales y que hoy son parte de esa secta ominosa en que cínicamente se convirtió la “esperanza de México” encabezada por su profeta hoy omnipresente en el poder máximo con capacidad de decisión aunque la titular formal, lo niegue.
¿De quién nos defendemos? Será de nuestros mismos pecados, de nuestras omisiones, de la improductividad y complicidades que impiden a millones de mexicanos el acceso a un empleo e ingreso digno, educación y salud que garanticen su existencia y desarrollo o al menos la seguridad para dedicarse a lo que deseen y vivir honrada y tranquilamente.
Porque si nos “aprietan” es por nuestras debilidades; el gobierno de la 4T sabe de eso pues el chantaje y la amenaza son parte de su estrategia operativa, así doblaron a opositores lo mismo políticos que empresarios, así consiguieron votos e hicieron de la corrupción y la impunidad sus armas incluso en el plano electoral y sus acciones reformistas cuyo único límite son sus propios intereses como aquello de la iniciativa contra el nepotismo electoral que se estrella con los verdes o los de casa como los Evelin y Félix Salgado, o los Monreal o…
Llamados a la unidad de ¿Quiénes? Si en palacio no cejan de ofender, provocar, descalificar a los diferentes a quienes no se agachan como los jueces, magistrados y ministros que por defender el estado de derecho defienden fueron ignorados, perseguidos y destituidos luego de una campaña siniestra de desprestigio desde la misma Presidencia.
Que se sumen los cómplices, los iguales, los responsables de este batidero donde los fraudes e imposiciones están a la orden y sólo son superados por la corrupción evidente de quienes hoy no son camaradas sino cómplices porque en la 4T como en toda organización criminal, no hay testigos.