Yo Campesino / Hipócritas
- Además de mentirosos, vengativos y traidores cuatroteros son ¡rateros!
Si fuera cierto que desde el Senado los cuatroteros pidieron al INE “bajar” candidaturas de sujetos ligados al crimen organizado, Guadalupe Tadeii, la consejera presidenta, lo hubiera hecho, pero todo es una farsa donde la delincuencia tendrá su tajada pues ya es parte del engranaje del gobierno; será el pago por “tantos favores recibidos” incluyendo su participación en comicios presidenciales, estatales y legislativos.
La petición es sólo para “lavarse la cara” en la farsa electoral que se avecina y donde el oficialismo pretende legitimar el fraude y asesinato de la democracia con una gran participación ciudadana. Que lo hagan, allá ellos porque ni siquiera sus agradecidos seguidores lo creen.
Dinero no solo “mata carita” sino también libertades y conciencias, justifica chaquetazos políticos y hasta religiosos o familiares: Un billón de pesos sostienen la base electoral de Morena así como prebendas, cargos públicos e impunidad para desertores de conciencia a los que simplemente se les llama traidores y que si bien se purifican en la 4T, en el imaginario colectivo se sabe lo que son.
Pero a pesar de todos sus pecados, insisten en llamarse demócratas, incorruptos y hasta revolucionarios que hacen de la pobreza su mayor fuerza electoral y mejor pretexto para enriquecerse, ahora sí que, a costillas del pueblo bueno, ya no tan sabio pero sí agradecido cada vez en mayor medida; recordemos que el peje lo dijo, lo pobres son parte fundamental de la estrategia para conservar el poder.
Y si para ello hay que mentir a ese pueblo con aquello de que algún día tendrán sistemas de salud como en Dinamarca y que con una farmaciota se solucionará el desabasto de medicamentos y con ello se evitará que mexicanos mueran por ausencia de tratamientos y fármacos, pues hay que falsear cínicamente, así lo han hecho siempre.
Quien diga lo contrario a la 4T, como jueces, magistrados, ministros, periodistas, personalidades, organizaciones sociales nacionales o extranjeras, desatarán la ira cuatrotera, esa que en sus venganzas es capaz de utilizar toda la fuerza del gobierno para destruir instituciones, honras, prestigios, vidas y desde luego, violar cualquier ley pues ellos, encarnan la verdad absoluta aunque se les compruebe lo contrario.
Mienten al hablar de su falsa honradez, probidad con discursos plagados de demagogia para escurrir responsabilidades, darse impunidad y culpar a otros de sus pecados, vicios y fracasos.
Las cacareadas honradez y pobreza republicanas se cubren con majaderías, persecuciones y revanchas , nunca con verdades ni argumentos; los culpables de todo son otros sin importar que a los morenos se les balconee en sus trapacerías como las de la anterior familia presidencial que resultó una troupé de rapaces rateros o la del propio profeta que proclamó el despojo de las jubilaciones y protecciones a sus antecesores y hoy vive en una finca fortificada, rodeado de seguridad, atenciones médicas y de comunicaciones como nunca otro exmandatario y si no sale al extranjero a dar clase o emplearse es porque es un ignorante, un bueno para nada menos para chantajear y robar.
Dónde quedaron sus virtudes y plumaje blanco lo mismo que el de su vulgar esposa que de feroz antihispanista pide asilo en la madre patria o sus holgazanes hijos dueños del botín, de una herencia, maldita que nos gobierna y de la que no puede sacudirse su sucesora.
Pero ya eran rateros rapaces, corruptos probados como los rufianes de sus exgobernadores como los de Morelos, Veracruz, San Luis Potosí, Baja California, Chiapas, Tabasco, Sinaloa, Puebla, Oaxaca y demás quienes no obstante las pruebas de sus raterías gozan de impunidad y defensa mismas que se extienden a los tránsfugas del poder que se sienten genios por saltar “muy a tiempo” desde la tercera cuerda de los partidos que los cobijaron toda la vida, enriquecieron y corrompieron hasta por generaciones, para irse oportunistamente a ese basurero de la política llamado 4T, resumidero de corrupción.
Y lo peor o mejor de todo es que ¡Lo presumen! y se dicen ser la envidia de quienes prefirieron quedarse con los restos de la oposición o bien optaron por la congruencia de toda su existencia. Hipócritas los que mienten, quienes presumen lo que no son.
La historia de terror no concluye, habrán de llegar capítulos más negros que iniciarán con la farsa electoral judicial. Lo veremos pero no nos doblaremos.
Debemos insistir en no querer vivir en la ignominia de la tiranía de los peores. Por lo pronto como millones de mexicanos no convalidaré con mi voto el fraude contra la democracia.