Cicuta
Jaime Flores Martínez
Miércoles 17 de septiembre del 2025.- Atrapado en la resaca de la posibilidad de saciar sus ambiciones políticas, el youtuber bajacaliforniano Gustavo Macalpin debió sentirse frustrado al comprobar que sus intenciones se quedaron cortas.
La noche del pasado lunes en la explanada de los tres poderes del Estado en Mexicali, Baja California, el joven Macalpin intentó sabotear el evento del Grito de Independencia encabezado por su “examiga” la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda.
Quizá excitado porque una encuestadora lo ubicó 30 puntos arriba de MORENA rumbo a la elección de la presidencia municipal de Mexicali en el 2027, el joven Macalpin maniobró para que un nutrido contingente abucheara a la gobernadora morenista Marina del Pilar la noche del grito.
Y aunque Macalpin logró parcialmente su objetivo, la realidad indica que debió terminar frustrado pues sus objetivos no se cumplieron a cabalidad.
Y aunque Cicuta no busca lavarle la cara a la gobernadora, resulta evidente que Macalpin fracasó en su intento de boicotear el evento del lunes para demostrar que tiene poder de convocatoria.
Y aunque la gobernadora Marina del Pilar parece no darse cuenta, la realidad es que Macalpin está respaldado por su “exroomie” Jaime Eduardo Cantón Rocha, el diputado morenista que actualmente preside la Mesa Directiva del Congreso de Baja California.
La gobernadora Ávila parece “pasar por alto” que Cantón apoya a Macalpin en su ambición política, sin importarle que recurra al agravio contra la gobernadora.
Está claro que Cantón antepone sus pasiones carnales a sus sentimientos afectivos. Por eso prefiere respaldar a Macalpin.
Respecto a lo acontecido la noche del lunes, la gente convocada por Macalpin abucheó a la gobernadora, aunque nunca esperó que un grupo más numeroso apagara esos agravios.
Cicuta debe sugerirle a Macalpin que el juego limpio siempre será reconocido, mientras que las estrategias desaseadas despiden siempre olores nauseabundos.
Atrás
Satisfecha con el “entendimiento” alcanzado con el secretario de Estado norteamericano Marco Rubio García, la realidad es que la presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo consiguió —una vez más— simplemente “patear el bote”.
Para precisar lo anterior, debemos recordar que el poderoso funcionario Marco Rubio y la presidenta Sheinbaum no firmaron (no plasmaron) un acuerdo de seguridad, sino que “acordaron” que México hará su parte en el combate a los cárteles del narcotráfico.
¡La interpretación es que Estados Unidos le dio a México otra oportunidad y otra vez “el beneficio de la duda”!
Sin embargo, la realidad es que el gobierno de Donald Trump maniobra para “acorralar” a Sheinbaum y que “sea ella misma” la que rompa la protección que ofrece funcionarios de su gobierno a los Cárteles de las drogas.
Para los mexicanos medianamente pensadores está claro que el país vecino conoce perfectamente la identidad de quienes —en México— ofrecen protección a los narcos.
También deben entender que la presidenta Sheinbaum también sabe cuáles funcionarios están involucrados, aunque todos ellos están estrechamente vinculados con su intocable antecesor Andrés Manuel López Obrador.
Una de las líneas de ese “entendimiento” que el 3 de septiembre sostuvo Sheinbaum con Marco Rubio es precisamente descobijar a los jerarcas de la Cuarta Transformación que están vinculados con acciones ilegales.
El asunto es que Sheinbaum se resiste a romper con López Obrador y precisamente eso le impide tomar acciones contra personajes como Rubén Rocha Moya (gobernador de Sinaloa); Américo Villarreal Anaya (gobernador de Tamaulipas); Alfonso Durazo Montaño (gobernador de Sonora), así como encumbrados morenistas como el secretario de educación Mario Delgado Carrillo y el senador Adán Augusto López Hernández.
Si algún secretario se pusiera —por algunos momentos— en los zapatos de Claudia Sheinbaum seguramente concebiría que “el entendimiento” con Marco Rubio se convierte —en los hechos— en una bocanada de aire fresco.
Aún visto así, sería muy grave que la presidenta calificara como “más sencillo” tratar con Marco Rubio que con Donald Trump.
Si bien la propia Sheinbaum ha esquivado —una y otra vez— los embates de Trump, cometería un error si subestima las cordialidades que recibió de Rubio.
El mismo día que Marco Rubio visitó a la presidenta en Palacio Nacional, en la plataforma digital de Cicuta se publicó una nota titulada Sospechosa Cordialidad, donde se aluden las gentilezas que ofreció Rubio, ciertamente contrario a lo que muchos esperaban.
Quienes se dedican a la observancia aseguran que Marco Rubio utiliza una estrategia para “acorralar” a Sheinbaum, que incluye inyectarle confianza y por eso no sacó de su portafolio el documento donde la presidenta se comprometería.
No hay duda que Rubio pudo acordar con Trump la estrategia que trae en mente, pues en caso de incumplimiento de México entonces Estados Unidos pasaría de la cordialidad a la acción unilateral.
Cicuta ya refirió que durante su breve visita a México, el secretario de Estado norteamericano mantuvo un discurso diplomático y destaca que ambos países han alcanzado un nivel histórico de cooperación en los últimos meses.
En la conferencia conjunta con el canciller de la Fuente, Rubio subrayó que “se compartieron nombres de poderosos que fueron revelados por capos detenidos en Estados Unidos y que “ambos gobiernos tienen la obligación de capturarlos”
Aunque se supone que algunas expresiones dadas por Rubio en la conferencia debieron incomodar a la presidencia, el funcionario estadunidense dijo que durante su reunión con Sheinbaum “se acordó el intercambio de información entre agencias como DEA, FBI, CIA y Homeland Security, lo que significa que a partir de ese día se terminan las frases que Sheinbaum ha externado específicamente contra la DEA.
Además, anunció la creación de un grupo de alto nivel para combatir a los cárteles, con participación directa del gobierno de Trump en la definición de estrategias.
Se prevé una ofensiva contra los grandes capos que permanecen libres, con intercambio de información y tecnología.
Y llegó una advertencia que pasó prácticamente desapercibida o al menos no se destacó en los medios:
Si no hay resultados inmediatos por parte de México —dijo Rubio— será inevitable la escalada con la posible entrada de escuadrones estratégicos del Comando Sur.
Conclusión: el “entendimiento” debe ser entendido.
Más vale cumplir, porque la “soberanía” de Estados Unidos está en riesgo.
De que se mueran mis burros a que se mueran los burros de mi compadre. Mejor los de mi compadre.
Positivo
Qué bueno que el ánimo y el nacionalismo de los mexicanos se mantiene pese a las adversidades.
Aunque algunos digan que los mexicanos “estamos mejor”, la realidad es que —por lo visto— algunos sí están mejor.
La intención es destacar que el corazón de los mexicanos es tricolor y nunca pierde la esperanza.
El Grito de Independencia de hace 2 días, es la mejor muestra del patriotismo de todos los mexicanos. Cicuta repite, de todos.
Cicuta News.com Cicuta.com.mx Twitter: @cicutabc Facebook: cicuta YouTube: jaime cicuta columna Instagram: jaime flores cicuta