Ricardo Del Muro / Austral
Ace Frehley, el mítico guitarrista que puso fuegos artificiales al rock de Kiss, ha muerto a los 74 años en Morriston, Nueva Jersey, informó este viernes The New York Times. Un comunicado de su familia dijo que la causa del fallecimiento fue una reciente caída en su domicilio, señaló el periódico neoyorquino, anunciando que próximamente publicará un obituario completo del músico.
La figura de Frehley ocupa un lugar esencial en la historia del rock, no sólo por su papel como guitarrista fundador de Kiss, sino por su transformación en “Spaceman”, uno de los personajes fantásticos que fueron la atracción de los baby boomers tardíos y los tempranos integrantes de la Generación X, que vivieron el rock pesado como escapismo y fantasía para salir de la aburrida cotidianidad, en un mundo aún marcado por el post – hipismo y los cambios sociales de los setenta.
Frehley ha entrado en el panteón de honor de la música popular bajo el nombre de guerra de Spaceman, el hombre del espacio, o Space Ace, el as del espacio, por las estrellas plateadas que se pintaba en los ojos, sobre el maquillaje blanco del resto de la cara, durante los conciertos de la banda, señaló la crónica de Alejandro Santos Cid, corresponsal de El País en Nueva York.
Un texto que recordó la historia de Kiss, que empezó como solían empezar las historias de los grupos de música antes de internet: con un anuncio en las páginas del periódico local. En 1973, el bajista Gene Simmons, el guitarrista Paul Stanley y el baterista Peter Criss pusieron un aviso en el Village Voice, influyente megáfono de la institucionalizada contracultura neoyorquina de entonces, en busca de un guitarrista solista con estrella y habilidad. “No nos hagas perder tiempo”, alertaban. Frehley no lo hizo. A los 18 años había girado como roadie de Jimi Hendrix y la experiencia forjó su gusto por los solos evocativos que bebían del blues y la psicodelia.
Nacido en el Bronx neoyorkino, el 27 de abril de 1951, Paul Daniel Frehley, creció en una familia de músicos debido a que sus padres eran pianistas y pronto aprendió a tocar este instrumento y la guitarra acústica, señala su biografía en Wikipedia. Durante su infancia también cantó en el coro de la iglesia local, para después tocar en varias bandas hasta que a los 18 años se convirtió en “técnico de gira” de Hendrix.
A finales de 1972, un amigo le mostró el anuncio en el periódico The Village Voice en el que la banda solicitaba un guitarrista principal. Frehley contactó por teléfono con el grupo y recibió una invitación para realizar una audición en enero de 1973. Debido a que no tenía suficiente dinero para hacer un viaje en taxi y la dificultad de transportar su amplificador y su guitarra en el metro, el músico tuvo que pedir a su madre que llevara en coche a la cita.
Así comenzó la historia de Kiss. Frehley diseño su logo y cada uno de los integrantes decidieron crear un personaje fantástico. El guitarrista optó por pintarse el rostro de blanco con un antifaz gris de forma estrellada alrededor de cada ojo y adoptar el personaje de Space Ace, también conocido como el hombre del espacio.
En febrero de 1974, Kiss publicó su álbum homónimo, el cual, Ace Frehley apareció acreditado como compositor de dos temas: “Love Theme from Kiss”, coescrita junto a sus tres compañeros y “Cold Gin”. Debido a la falta de confianza del guitarrista por actuar también como vocalista, este pidió a Simmons que fuera el cantante en “Cold Gin”. A pesar de que la reputación de Kiss como banda en directo había aumentado, las ventas del disco no fueron las esperadas, pero permitieron al conjunto grabar un segundo trabajo de estudio.
En octubre salió a la venta “Hotter than Hell”, que incluyó las composiciones de Frehley “Parasite” y “Strange Ways” (cantadas por Simmons y Criss, respectivamente) y “Comin Home”, co-escrita con Stanley. Las ventas de esta segunda obra fueron mejores, lo que permitió al grupo aumentar su popularidad.
La etapa de éxito de la banda en los años 70 fue marcada por una serie de álbumes que se convirtieron en clásicos del rock. Destroyer (1976) y Rock and Roll Over (1976) solidificaron su lugar en la historia del rock. Estos álbumes presentaban himnos como Detroit Rock City, Beth, Shout It Out Loud y I Want You, que se convirtieron en himnos del rock y catapultaron a la banda a la fama mundial.
Si hubiera que elegir una sola canción que defina a Kiss, varios especialistas coinciden en que sería “Detroit Rock City”, porque reúne todo lo que fueron y representaron: el poder del riff de Ace Frehley y la energía vocal de Paul Stanley. El solo de Frehley está considerado uno de los mejores del hard rock de los años setenta; está lleno de bends, vibratos y frases melódicas que se volvieron su sello. Fue tema de una película homónima en 1999, sobre un grupo de adolescentes en su intento por asistir a un cocierto de Kiss en 1978. Una narrativa trágica y heroica del rock. Es el tema que transformó a Kiss de una banda de maquillaje a un mito del rock.
Aunque la canción más popular de Kiss es “Rock and Roll All Nite”, incluida en su album Dressed to kill de 1975, que algunos consideran un himno generacional: “I wanna rock and roll all nite, and party every day”. Otra canción emblematica de Kiss, pero diferente al estilo de Frehley, es la balada Beth, interpretada por su compositor Peter Criss en el disco Destroyer de 1976. Beth, en su momento, sorprendió por ser una balada orquestal, sin guitarras eléctricas, acompañada sólo por piano y cuerdas. Fue una ruptura radical con la imagen dura de Kiss.
Sin embargo, como indica la crónica de Alejandro Santos en El País, el sueño del rock and roll produce monstruos y la gloria pronto tomó la forma de cocaína y demás repertorio de drogas duras y excesos. Después de 11 álbumes, discos de estudio y directos, Frehley abandonó Kiss en 1982 ásperamente, entre rumores de peleas y roces con el resto del grupo.
Tras la salida, Frehley grabó un puñado de discos en solitario que nunca se acercaron al éxito comercial de Kiss. En los 90 y los 2000 regresó con sus viejos compañeros en nostálgicas giras de reunión que seguían enfadando a los críticos y llenando estadios por medio mundo. En 2014, los miembros fundadores de Kiss —Frehley, Simmons, Stanley y Criss— fueron homenajeados con su inclusión en el Salón de la Fama del Rock & Roll. RDM