HOMO POLÍTICUS
PAVE SOBERANES
- Rotundo no Margarista al Tarifazo
La dualidad Legislatura 56-Palacio de Gobierno atentó contra la cínica compra de perros calientes gigantes con presupuesto proveniente de los ciudadanos cumplidos con el pago de sus contribuciones.
¿Quién perpetró semejante desenfreno? El responsable de garantizar a ciudadanos el acceso a la información pública y de transparentar, como el derecho que es, el actuar de los servidores públicos del estado de Morelos, en nombre de la honestidad.
Su nombre es Hertino Avilés II, comisionado del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística, quien pagó la entrada al cine con dinero público y hasta un perro caliente gigante se compró, que lo metió en gastos personales para que se le regresara el pago de su bolsillo, en día y horario laboral.
Transparencia y rendición de cuentas, términos políticamente correctos pero falsos, no son de ninguna manera honestidad. Como Avilés, históricamente todos los comisionados utilizaron dinero público para saciar su hambre y sed de privilegios. Incluso, algunos tienen observaciones pendientes con el IMIPE y otros, carpetas con el brazo largo de la justicia, por actos de corrupción.
Ese organismo que nunca fue autónomo ni diferente, fue necesariamente desaparecido por la Legislatura 56. Era un elefante blanco costosísimo para las familias de Morelos que cumplen con sus contribuciones al Sistema de Administración Tributaria. Imagine estar pagando con los impuestos ciudadanos café, galletas, huevos divorciados y hasta jotdocs jumbo. A instancias de Palacio de Gobierno, Gándara sin número votó su desaparición y sus atribuciones pasarán a la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, con el 75 por ciento de la composición cameral, es decir, mayoría calificada.
letraschiquitas
Puntual mentís dio la gobernadora Margarita González-Saravia al barbaján cabecilla del cártel transporteril, Dagoberto Rivera, quien la víspera dijo que la mandataria se había comprometido a autorizar un incremento a la tarifa del transporte de pasajeros, lo cual fue y es una gran mentira. Lo importante es que Bellis Perennis no se ha dejado chantajear como todos los gobernadores —le llamaban cínicamente «cumplimiento de compromisos de campaña»—, con excepción de Lauro Ortega [†] que plantó cara con determinación al pulpo camionero, hasta extinguirlo. Dudar que la misma medida se aplique todo el sexenio, sería perder si apostar. Debe haber incremento al pasaje, sí, pero no tarifazo como el del cuauhtemato de 2021 ejecutado por Víctor el Güero es… Mercado —la mano siniestra que mece la cuna— y hasta en tanto no se cumplimente la modernización por ley del parque vehicular y abiertas otras opciones de beneficio colectivo, so pena de retiro de concesiones. Para no autorizar el «aumento al pasaje», como erráticamente se dice, hay que actuar no como jefe —«Hazlo como yo digo»—, sino como líder —«Solucionemos esto juntos»—, cosa muy distinta.




