• Del incómodo desacuerdo a la tersura republicana
• La Comisión Permanente convocará a extraordinario
Del aparentemente irreconciliable desacuerdo, los senadores pasaron a la tersura del acuerdo, ablandando posturas, para que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión pudiera convocar al primer periodo extraordinario, en pleno receso legislativo, y así aprobar las leyes secundarias de la reforma electoral, que normarán la vida de los partidos políticos y la organización de los procesos electorales, comenzando con el del que está ya por comenzar y que culminará con las elecciones intermedias de 2015.
Con los acuerdos tomados en las comisiones unidas de reforma del estado, gobernación, justicia y estudios legislativos segunda del Senado, se allana el camino para que el Senado envíe de inmediato las minutas a la Cámara de Diputados y ésta las apruebe ipso facto entre este miércoles y el jueves.
Atrás quedaron los desacuerdos. Habrá nuevos mecanismos jurisdiccionales: la ley general de instituciones y procedimientos electorales, que abrogará al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) y la ley general de partidos políticos y medios de impugnación.
Así este martes concluyó la mesa de negociación entre los partidos representados en el Senado. Y las comisiones comenzaron a sesionar para terminar con la redacción de las minutas y su dictaminación para ser aprobadas en el pleno y luego ser enviadas a la cámara de diputados. Y es cuestión de horas para que los partidos políticos cuenten con nuevas reglas de juego electoral.
Prácticamente todos los temas que atoraban la negociación fueron zanjados, como si nunca hubieran sido motivo de discordia. Como por arte de magia, los senadores alcanzaron consensos en el tema de las candidaturas comunes, en el del modelo de comunicación, en el financiamiento privado, y en el prorrateo de las campañas políticas para elecciones de presidente, senadores, diputados y cargos locales.
Solamente quedaron en el tintero la sobre y sub representación de los partidos en los congresos locales y los casos de conteo aleatorio en una elección, cuando el resultado sea menor al 1 por ciento. Pero estos asuntos serían abordados en comisiones y seguramente serían motivo de acuerdo.
Prácticamente, hasta este martes, ya no había temas encorchetados o irreductibles. “No podemos decir que es una ley perfecta, pero es una ley que tiene muchos aspectos de vanguardia, modernidad y dará certeza a los ciudadanos”, dijo el senador Miguel Ángel Chico Herrera, priísta presidente de la comisión de reforma del estado.
Para el perredista Alejandro Encinas, presidente de la comisión de estudios legislativos segunda, los equipos de trabajo revisarían los acuerdos alcanzados para contar con los tres dictámenes: el de la ley general de instituciones y procedimientos electorales, el de la ley general de partidos y sistemas de impugnación.
El panista Juan Carlos Romero Hicks aseguró que los panistas estaban satisfechos con los resultados de la negociación. “Estamos tratando de construir mejores reglas para que se dé certeza, legalidad, independencia, objetividad e imparcialidad, y el máximo de transparencia al momento de una elección”, dijo el senador albiceleste.
Así quedará cerrado un capítulo más de esta telenovela reformista. Por lo que toca a lo electoral, el Instituto Nacional Electoral podrá tener en sus manos los instrumentos legales para organizar los institutos estatales y organizar los procesos de elección de los 500 diputados que conforman la legislatura federal, las nueve gubernaturas que tienen que cambiar, así como las otras elecciones estatales y municipales.
Quedan pendientes las reformas en materia económica, la que normará el negocio de las telecomunicaciones y la que dará luz verde a la privatización de los planes de negocios de la hasta ahora empresa paraestatal, Petróleos Mexicanos, y la Comisión Federal de Electricidad, que con toda certeza se irán para el mes de junio.
fgomezmaza@analisisafondo.com
www.analisisafondo.com
@AFDiario
@ANALISISAFONDO