En impacto para la economía que representa la Ley de Seguridad Fronteriza, Oportunidad Económica y Modernización de Inmigración. Ley S744.
Esta Ley, no fue ratificada en la Cámara de Representantes donde permanece estancada disfrutando “el sueño de los in-justos”, aunque si, en la Cámara Alta de los senadores, representa una derrama económica en el país que merece revisarla.
La Ley S774, ni por asomo, se acerca en calado a la orden ejecutiva que recién firmó el presidente Obama que regularizaría a 5 millones de inmigrantes sin papeles de los 11 millones que residen en el país.
La orden ejecutiva, o como también se le conoce como decreto presidencial, contempla ofrecer permisos de trabajo, el codiciado Social Security, la credencial del seguro social necesaria para cualquier trámite oficial o privado. Equivale a la tarjeta de identidad, sin ella se es un desconocido, cero a la izquierda. Ambos beneficios son temporales y no representan camino a la ciudadanía, eso sí, la obligación a pagar impuestos.
A familiares de residentes o naturalizados se les permitiría el acceso esos beneficios, lo mismo a los Dreamers, los soñadores, quienes son aquéllos que ingresaron al país entre los 7 y 14 años de edad y, están estudiando. Igual, es temporal, en este caso en realidad es una extensión de otra orden ejecutiva que firmara el presidente el año pasado para favorecerlos.
La Ley S774, es de mayor envergadura al permitir la regularización de millones de personas y, abriría del camino a la ciudadanía para el total de 11 millones de inmigrantes sin papeles, de varias nacionalidades, que se estima viven en Estados Unidos. Los mexicanos representan el 70/75% de ese total.
La Oficina de Presupuesto del Congreso de Estados Unidos realizó unos cálculos preliminares sobre el impacto que tendría esa Ley de ser aprobada. Estas son algunas de las cifras que resultaron de esas estimaciones
PIB: el producto interno bruto crecería, entre 2013 y 2023, en 3,3 %, y un 5,4 % adicional en la siguiente década, hasta 2033.
El déficit del país se reduciría en 200,000 millones de dólares en la primera década y, aproximadamente 700,000 millones en la segunda. Primordial para un país con un notable desequilibrio fiscal.
Impacto en el mercado laboral: De acuerdo, a las cifras, del Center for American Progress (CAP), un centro de estudios progresista, “se incorporarían 159,000 nuevos trabajos cada año durante los próximos cinco años; y se pagarían impuestos adicionales por valor de 144,000 millones de dólares a nivel federal, local y estatal en los próximos cinco años”.
También, este centro estima, que “con solo uno de cada tres inmigrantes indocumentados trabajando en la economía formal y contribuyendo con $12,000 millones de dólares en impuestos, EE.UU. pierde cerca de $20,000 usd en ingresos por impuestos laborales al año”.
Programa de Salud, Medicare: Actualmente, este enfrenta graves problemas fiscales y financieros para enfrentar los programas de los adultos mayores, que de haberse aprobado la Ley S774, aportaría ingresos frescos derivados de la participación de “los nuevos ciudadanos. Su participación se estima en 150,000 millones de dólares en los próximos 30 años, lo que le daría aire y solvencia del fondo.
Si los legisladores republicanos conocen bien las bondades de la reforma migratoria porque se empecinan en rechazarla, al menos por ahora. La repuesta razonable a su tozudez, son intereses políticos electoreros para desprestigiar a los demócratas.
El mercado del voto hispano “solo representa el 18% del total de los electores. ¡Vaya si no hay que pastorearlo!