SILOGISMOS
Por Antonio Ortigoza Vázquez/ @ortigoza2010
Especial Expediente Ultra
Para que no quedara duda, frenar habladurías y dejar en claro que los golpes bajos son cosa del pasado, los principales -o únicos- precandidatos del tricolor a la gubernatura: la senadora Carolina Viggiano y el alcalde Israel Félix compartieron la misma foto para sus respectivas redes sociales.
El texto que acompaña la imagen solo cambia nombre:
“Con mi compañero (a) y amigo (a)… después de una gran plática. Juntos y en unidad todo será mejor para Hidalgo”.
Ambos aparecen con una gran sonrisa, como rúbrica a la plática de conciliación donde, se conjetura en muchos medios políticos, abordaron temas como los golpes bajos en la pugna por la nominación, la necesidad de frenar la ríspida forma en que cada uno por su lado pretende lograr preponderancia en la carrera por la candidatura y respetar además de respaldar la decisión que se tome en el partido.
Pero lo que campea en ese mensaje conjunto, es la gran capacidad de liderazgo que desplegó el gobernador Omar Fayad Meneses en el gran acto partidista del pasado domingo 28 de noviembre, donde subrayó con mucho énfasis la importancia de la unidad, lealtad y disciplina a las reglas del partido, cuando recordó tajante: “Todos participan, pero solo uno gana la candidatura”.
Cuando rememoró que a él mismo le tocó en suerte apechugar tres veces consecutivas la negativa del partido a favorecerlo con la nominación y de cómo se incorporó de inmediato en la campaña del favorecido con la decisión.
Porque llamados a la unidad y serenidad de aspirantes han sido muchos a lo largo de los años, con escasa o nula eficacia, porque los golpeteos han surgido en automático, directos o a trasmano, lo que lesiona la credibilidad del partido.
Por lo pronto, Carolina e Israel, en vías de hecho, ya firman un pacto de no agresión y de madurez política a la hora de que el partido anuncie la decisión final. Así se ve el panorama, por lo menos.