Yo Campesino / Crimen masivo
• A pesar de la bufonada el Ganso no ríe, su cohorte lo hunde más y la tragedia crece
Miguel A. Rocha Valencia
La verdad, no las veo ni las escucho, prefiero la síntesis de unos minutos, pero los rollos presidenciales cada vez son más repetitivos, menos congruentes y en algunos casos causan risa por lo contradictorio y las tristemente célebres frases como: “tengo otros datos”, “culpa de los neoliberales”, “mi plumaje no se ha manchado” (por la corrupción) “no soy como los otros” y algunos dicharachos más que finalmente son mentiras para encubrir sus errores y deficiencias.
Pero si queremos un cambio de régimen, las mañaneras deben continuar, el único que puede vencer al Mesías tropical en una elección, es él mismo. La débil, fragmentada y desacreditada oposición, sin hacer caso a provocaciones del Ganso para que den la cara abiertamente, deben prepararse para cachar el poder como única alternativa en nuestro sistema de partidos.
Prepararse no para usufructuar y repartirse el poder sino para intentar al menos, recuperar algo de lo que carecen: credibilidad y en base a ella, unificar al país hacia una etapa de reconstrucción de instituciones, economía, infraestructura política, pero, sobre todo, superar la tragedia en que el actual mandatario tiene sumido al país.
El reto en caso de recuperar el poder, será mayúsculo pues enfrentarán no sólo sus propias debilidades que incluyen proclividad a la corrupción, a los vicios de tener el mando, pero, sobre todo, enfrentar los poderes fácticos, donde el crimen organizado jugará un papel preponderante en materia electoral. Ya lo hizo y doblegó a la autoridad civil.
NO prosperaron las quejas y las pruebas de evidente irrupción de la delincuencia la cual pasó de la amenaza a la acción directa y cínica como en Sinaloa, Sonora, Nayarit y Baja California. El corredor más cotizado para el trasiego de drogas hacia Estados Unidos.
Por lo pronto el caudillo de la 4T lanzó el reto a los opositores para que se reagrupen y realicen activismo frente a la consulta de revocación de mandato (yo no estoy de acuerdo con eso) y le pidan al pueblo que lo saque del gobierno.
Mostró que sí le dolió lo ocurrido en la elección de junio pasado donde perdió la mayoría absoluta para reformas a su antojo la Constitución, tanto que no sólo arremete contra el INE al que acusa de no ponerse las pilas en la fracasada encuesta sobre el enjuiciar a actores políticos del pasado sino también a los “políticos corrutos, la mayoría de los medios de información, los sectores más retrógrados, salió el pensamiento rancio, conservador”.
O sea que sí está enojado y luego para colmo, en un intento por desmentir lo de aumentos de las tarifas eléctricas y otras verdades publicadas, su garbancera encargada de los desmentidos a medios, aceptó que las cifras eran reales, pero que se “habían exagerado” ¿?
Ante eso no queda sino sonreír, qué bueno que no voy a las mañaneras, me hubiese ganado la carcajada como en otros episodios donde el hígado presidencial le gana a la verdad.
Por ejemplo cuando justifica las pillerías de sus hermanos recaudadores de dineros ilícitos o cuando toma decisiones que afectan al pueblo sabio y bueno, que si no fueran tan dañinas como la falta de medicamentos oncológicos y enfermedades crónico degenerativas, el cerrar ductos en una falsa lucha contra el huachicol, imponer precios tope al gas de importación que generará escasez, eliminar refugios para mujeres agredidas, quitar presupuesto a guarderías o becas a estudiantes destacados, entre otras bellezas.
Ni hablar de crecimiento que fue sustituido por bienestar, que los abrazos sustituyeron la persecución a los criminales y les entregó regiones enteras del país, así como 92 mil asesinatos mientras gasta en una Guardia Nacional de 100 mil elementos que no sirve para combatir inseguridad, pero si tiene propósitos políticos, tantos, que valen otros 50 mil millones de pesos adicionales a los 36 mil millones presupuestados.
Lo de los 350 mil muertos por Covid-19 ya es de locura ya que incluso en pleno repunte de la pandemia ordena que, contra toda lógica, llueva, truene o relampaguee, los niños regresen a clase. No importa que los padres de esas criaturas, adolescentes y adultos jóvenes digan que no. El Ganso habló justo cuando el repunte cobró más de 630 muertos y por arriba de los 20 mil contagiados en un día.
En eso es donde la oposición tiene su mejor arma. Difundir los errores y bromas de las mañaneras es la mejor propaganda contra el machuchón de Palacio Nacional. Ahora sí que fuego contra fuego y los de enfrente, a cachar resultados.
Para los opositores, sería su última oportunidad y para el país, no caer en un régimen autoritario derivado del desengaño social.